CON SU DIRECTOR, ALVARO GARCÍA

Locales | 01 Abr “La idea que tenemos es que no hay refundación de ningún lugar, se sigue la línea de trabajo que había y se hacen también algunos aportes”, comenzó diciendo a EL TELEGRAFO el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto de la Presidencia de la República, Alvaro García. Sin embargo, detalló varias innovaciones que hará en la OPP durante su gestión, cambios sustanciales en reparticiones públicas y creación de nuevas agencias. Para García, “hay áreas muy importantes en la OPP, una es la descentralización, y para eso volvemos a llamar a la Dirección de Descentralización e Inversión Pública, que es una línea fundamental para la infraestructura”. Dijo que en esta dirección se integrarán “el Fondo de Desarrollo del Interior (FDI), programa del BID, la continuidad del programa de la Unión Europea, Uruguay Integra, que termina el año que viene y entra todo el Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP), en el cual la OPP tiene el cometido de controlar la inversión que se realiza tanto desde los gobiernos departamentales, del gobierno nacional y de las empresas públicas. Es un sistema integral con todo lo necesario para los proyectos de inversión y que nos va a permitir tener el inventario completo de la inversión pública para hacer las priorizaciones que correspondan porque siempre las necesidades son mayores que los recursos”.

INVERSIONES DESORDENADAS
Sobre si también coordinará las inversiones, que hoy están desordenadas, afirmó que “los gobiernos departamentales, el gobierno central y las empresas públicas han trabajado históricamente cada uno por su lado y muchas veces se superponen. El hecho de tenerlos en un solo lugar nos va a dar una visión integral”. No obstante, “ya hay un sistema en el cual las intendencias están cargando buena parte de sus proyectos y en el proceso presupuestal de este año vamos a intentar que el 100 por ciento de los proyectos de la administración central estén en el sistema, también de las empresas públicas y de los gobiernos departamentales, en la medida que estén presentes en sus presupuestos también el 100 por ciento. Toda la inversión pública va a estar este año dentro de ese sistema integral”.
Sobre si habrá más recursos para la descentralización, dijo que “va a depender del proceso de presupuesto nacional. Habrá que ver qué posibilidades hay, pero se trabajará tanto en volumen como en distribución, y seguirá dependiendo de la Comisión Sectorial de Descentralización (integrada por seis intendentes y seis ministros del área de desarrollo) que establecerá las prioridades. Ahí estará todo el apoyo, el diálogo y la coordinación necesaria, y se mantendrán a rajatabla, como en los dos últimos gobiernos del Frente Amplio, los compromisos asumidos a nivel presupuestal. Eso me parece importante para que las intendencias tomen buenas decisiones financieras”.

MIRADAS DE LARGO PLAZO
En el marco de las cuatro áreas que el jerarca dijo que priorizará en su gestión, también están “tratar de darle a Uruguay una mirada permanente y sistemática de planificar a largo plazo, haciendo prospectivas de qué escenario va a tener el país, la región y el mundo. Eso puede brindar información con las alertas que puede haber en el largo plazo, qué decisiones se pueden tomar ahora para anticiparlas, qué riesgos puede haber, y también las oportunidades, ver qué cosas podemos aprovechar teniendo una mirada más larga”.
Detalló que “ahí entran todos los temas nacionales, tanto económicos, sociales, ambientales o culturales, porque es una planificación integral. Dentro de lo económico hay desafíos importantes para Uruguay en los próximos años, como qué pasará si se encuentra petróleo, por ejemplo, qué tratamiento institucional se le va a dar, cómo será la explotación, qué institucionalidad tenemos que generar, quién va a ser el ente regulador. Al respecto, hay un camino que la Dirección de Industria del ministerio anterior ha dejado planteado que tiene el ejemplo de países que lo han hecho muy bien, porque el petróleo debe ser una bendición, no una maldición. Y hay países que lo han hecho muy bien, como Noruega, donde son muy conservadores en el uso que le dan a la riqueza que puede generar el petróleo. Habrá que ponerle inteligencia para que el impacto que pueda tener el descubrimiento de petróleo lo aprovechemos, no es solo el hecho que eventualmente pueda salir más barato el combustible, sino que hay un impacto sobre la sociedad y la economía completa del país, y eso está demostrado. Eso es solamente un ejemplo”, aclaró.

SISTEMA DE COMPETITIVIDAD
También anunció, entre las nuevas tareas de la OPP, y definido como “cuarta área, el rol de secretaría permanente del Sistema Nacional de Competitividad, que lo hemos planteado como un reordenamiento y un impulso de agencias importantes con el trabajo público-privado para la mejora de la competitividad en áreas como la micro, pequeña y mediana empresa, las formas cooperativas, la capacitación, el comercio exterior y la atracción de inversiones, y la innovación”.
Consultado sobre qué habrá de nuevo, porque ya hay agencias estatales trabajando en esos temas, García respondió: “Sí, está la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), el instituto Uruguay XXI, el Instituto Nacional de Cooperativismo (Inacoop), el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU), el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop). Están, pero han funcionado como compartimientos bastante separados. Y si bien se ha avanzado mucho en los últimos años, a nivel del programa del Frente es un salto cualitativo, hacer una institucionalidad superior en materia de ordenamiento público-privado, con ofertas públicas y programas de apoyo para el desarrollo productivo y la innovación, en un trabajo conjunto con el sector privado. Y, por supuesto, con una dimensión territorial, como la actividad que tuvimos en Paysandú y que fue muy importante (junto a los candidatos a Intendente y sus propuestas) porque la hicimos junto con la Agencia para el Desarrollo, y le damos crucial importancia a la mirada local para el desarrollo del territorio, para aprovechar mejor las políticas públicas”.

NUEVA AGENCIA DE DESARROLLO
Mientras que la Corporación Nacional para el Desarrollo cambiará sus objetivos, pasando a ser una agencia de infraestructura del Estado, se crea la Agencia de Desarrollo, que estará como operadora del Sistema Nacional de Competitividad y al servicio de las instituciones ministeriales que cumplen funciones de apoyo al desarrollo, aunque ahora, en general, de forma separada.
“El esquema es así”, detalló García, “está la Presidencia de la República, luego un gabinete ministerial de definición de políticas del cual forman parte los ministerios del área económica (Economía, Industria, Ganadería, Turismo, Relaciones Exteriores, Trabajo y la OPP) formando el gabinete de competitividad. Las políticas las establecen los ministerios, y las agencias serán ejecutoras de éstas. La idea es que se trabaje mucho más coordinadamente, en un mundo donde las agencias son en general multiministeriales, son transversales. Y se va a mirar todo de una manera más integral, tanto en el sistema nacional de inversión pública, sistema de competitividad y también estará el tema de la coordinación de las empresas públicas”.
Consultado sobre cómo puede mejorarse la competitividad, considerando que muchas veces se atribuyen problemas por los costos del mismo Estado en el caso de la energía eléctrica o el agua, e incluso el precio del dólar, afirmó: “Si es que sirve y se puede, también hablamos de bajar la tarifa de UTE, pero van por carriles distintos. La competitividad es un concepto complejo y amplio, no depende de ninguno de esos factores y sí de muchos de ellos. Porque lo que se ha planteado históricamente de que el dólar es prácticamente la única medida para medir la competitividad de un país, no es tan así. Es importante porque es la conversión de lo que el país vende al exterior. Pero la competitividad tiene que ver con las capacidades que uno tiene para competir en el mundo, y tiene mucho que ver con la productividad que tenga una economía. Tanto desde lo que el Estado aporte con infraestructura o servicios públicos, como lo que los privados aporten y hagan dentro de su empresa, según la manera que producen, la tecnología con que trabajan y las capacidades humanas que tienen. Y por ahí va el crecimiento de un país, por la inversión física, mejora de la tecnología y la inversión humana. El país tiene éxito según como hace las cosas”.

MESA DE ENTES POR EFICIENCIA
Reconoció que también depende de “la propia eficiencia que tengan las empresas públicas. Por eso vamos a hacer un llamado inmediato a la mesa de presidentes de entes, que es un mecanismo que funcionó muy bien en el primer gobierno de Tabaré y luego se discontinuó un poco. Pero sirvió para que los presidentes de los entes se sentaran y pudieran coordinar sus políticas viéndolo desde lo general. Recuerdo que antes, en todas las localidades, cada ente tenía su local por separado. Y se empezaron a hacer sinergias de esfuerzos y de costos para hacer las cosas más racionalmente. Se juntaron los entes y hay un claro ejemplo en el caso de la Ciudad de la Costa, que precisaba un centro cívico y se juntaron las voluntades de los entes con la Intendencia de Canelones y al final también se hizo un shopping, una sala de cine y es un complejo importante. Y es muy bueno para el ciudadano tratar de simplificarle la vida, tanto desde el gobierno electrónico como con locales donde pueda hacer uso de los servicios o pago de las obligaciones”.
La forma en que se va a concretar la agencia es variada: “En algunos casos, se van a congregar funciones en una misma institución. Por ejemplo, la Agencia de Desarrollo planteada es para crecer, tener más posibilidades y recursos y para ayudar a la generación de una red de agencias de desarrollo local. Ya no es coordinar entre partes separadas (para una actividad), sino juntarlas para ser más eficiente”.

LA CND PARA INFRAESTRUCTURA
Sobre cómo se va a manejar esta agencia y qué diferencias tiene con la Corporación Nacional para el Desarrollo, García dijo que “el planteamiento es que todo lo que sea apoyo al desarrollo productivo salga de la corporación, y que quede como una agencia absolutamente imprescindible para el desarrollo de infraestructura, con todo lo que ha aprendido con el trabajo en la Corporación Vial del Uruguay, la Corporación Ferroviaria y administrando fondos, como en el caso de ANEP, que ha construido y reformado escuelas administrando los dineros de ANEP para hacer infraestructura, y lo mismo puede pasar con ASSE si decide hacer hospitales. Y lo que la corporación podrá hacer como agencia de infraestructura, es que no solamente se tenga que trabajar con fondos públicos. Como país, necesitamos armar y fortalecer la inversión público-privada y eso se puede hacer por diferentes mecanismos de estructuración en que la corporación puede ayudar mucho, como en el Ministerio de Transporte o el de Vivienda, el de Interior para cárceles o el de Salud para hospitales. Y la corporación puede tener los mecanismos para que la integración de capitales público-privados vaya más rápido que hasta ahora. Aprender de los procesos que se han dado y desarrollarlos mejor, apoyando a los ministerios y a los privados para que el instrumento de la Participación Público-Privada sea más ágil. Especializando a la CND como agencia de infraestructura, creo que dará una mano grande”.


La gestión del Estado y la reforma
Para el director de la OPP, Alvaro García, es importante lo que va a hacerse a corto plazo en cuanto a “administración central, presupuestos, empresas públicas y control de la gestión. Y a lo que agregamos algo que incluimos en el primer gobierno de Tabaré: un área de evaluación del Estado. Ya se están haciendo evaluaciones de las políticas públicas, que es fundamental para saber si sirven o no”. Sobre si se continuará con la reforma del Estado, García dijo que ésta “se hace prácticamente todos los días. Cuando hablamos, por ejemplo, de sistemas de competitividad, también es reforma del Estado. Son cambios institucionales que nos hacen tener un Estado sustancialmente distinto que el que teníamos hace unos años. No es la reforma imaginaria que mueve todo de una vez y para siempre. Por ejemplo, hoy Uruguay es el número uno en la región con el gobierno electrónico, y tenemos que avanzar en otras áreas. Uno de los objetivos que hay es que todos los trámites se puedan hacer en forma electrónica, y para eso hay que avanzar en reformas en un montón de organismos, hay cosas para remover, como usos y costumbres históricos”.
En cuanto a si habrá cambios en la cantidad de los funcionarios del Estado, recordó que “tenemos la ley de inamovilidad de los funcionarios públicos que hace muy difícil algunos cambios”. Aunque también pueden dejarse de llenar vacantes, a lo que dijo que “ahora en la OPP estamos redireccionando un montón de funciones y personas, adecuándolos a la nueva estructura. Todos los colegas van haciendo esas cosas y haciendo tareas diferentes de acuerdo a las prioridades”.