Rurales | 01 Abr Marzo de 2015 finaliza con solo 22 milímetros –el promedio para el mes es de 147--, convirtiéndose en el de menos cantidad de agua de los últimos diez años, superando en un milímetro los 23 caídos en marzo de 2008.
Los 22 milímetros se desglosan en 4 milímetros del domingo 1º, y 18 milímetros entre el martes 3 y el miércoles 4, de acuerdo con la información aportada por la Estación de Meteorología de Paysandú. Estos datos reflejan la angustiante situación que atraviesan los campos de la región, teniendo en cuenta que en febrero solo llovió 42 milímetros cuando el promedio para el segundo mes del año es de 135 milímetros.
En el primer trimestre del año, la suma de los promedios establece que tendrían que llover 382 milímetros, pero en el presente año se llegó a 312, destacándose que solo en enero fueron 250 milímetros y entre febrero y marzo llovió 62 milímetros.
La seca que se aprecia en los campos se agudizó por las altas temperaturas en prácticamente todo marzo y por las precipitaciones escasas, que impactaron negativamente en los cultivos de soja y sorgo, verdeos y praderas recientemente sembradas, que no han tenido crecimiento, ya que desde el 4 de marzo que en la zona no cae una gota.
Por el momento los pronósticos no son muy alentadores, coincidiendo varios informes en que recién para el miércoles 8 de abril se podrían producir lluvias en el litoral del país.
Junio 2004 con 0,4 mm sigue siendo el mes con menos cantidad de agua en el presente siglo. Le sigue julio 2014 con 3 mm, julio 2007 con 8 mm, y junio 2008 con 10 mm. En cambio, febrero 2010, con 569 milímetros, sigue siendo el mes de mayor cantidad de agua en el siglo.

PERSPECTIVA
Después de 18 meses de pronósticos neutrales a secos, la Oficina de Meteorología de Australia (BOM) divulgó una perspectiva muy positiva de precipitaciones para el segundo trimestre del año.
Australia, que sufre una sequía virtualmente crónica en los últimos años, ha inundado el mercado estadounidense de carne vacuna en este arranque del año, dadas las dificultades desde el punto de vista forrajero para sostener el rodeo vacuno.
En el acumulado de lo que va del año prácticamente duplicó sus exportaciones de carne a Estados Unidos, fundamentalmente carne magra de vaca, que compite con el producto uruguayo, sostiene un informe de Tardáguila Agromercados.
De acuerdo con la BOM, el período abril-junio será más húmedo de lo normal en la mayor parte del territorio australiano. Para la mayoría de WA (Australia Occidental) hay asignada una probabilidad de entre 70%-75% de que el nivel de precipitaciones supere la media, mientras que las regiones del interior y la mayoría del sur tienen una probabilidad del 80% sobre el promedio.
En las últimas tres semanas se detuvo la fuerte corrección a la baja de los precios de importación de carne vacuna de Estados Unidos y el volumen de oferta desde los países de Oceanía juega un papel esencial en ese sentido.
Las importaciones de carne de Australia son actualmente un 97% más abultadas que hace un año atrás, con más de 66.000 toneladas que pasaron por la Aduana de Estados Unidos en el año al 23 de marzo. Ayudaron a mejorar los precios el comienzo de la desaceleración estacional de la faena de vacas en Nueva Zelanda.
Un informe reciente de NZX Agrifax indica que la faena de vacas de Nueva Zelanda entre marzo y setiembre será de 100.000 cabezas menos que el año pasado. A esto se podría sumar, si se confirman los pronósticos de mayores precipitaciones en Australia, una menor oferta desde ese país, principal proveedor del producto.
Para los competidores de Australia sería una mala noticia pensando en el mediano y largo plazo, dado que permitirá que ese país sostenga su rodeo vacuno. Pero en el corto plazo puede promover una retención del stock, con la consiguiente caída en la oferta de vacas, mejorando las posibilidades de colocación del producto uruguayo en el mercado estadounidense en un momento de dificultades en otros destinos.