OPINIÓN

Locales | 12 Abr INCONSISTENCIAS E IRREGULARIDADES CONFESADAS POR LA INTENDENCIA
Un inveterado adagio jurídico enseña que a confesión de parte relevo de prueba y en la sesión de la Junta Departamental los representantes de la Intendencia fueron contundentes en su contra, al expresar que en la 48ª Semana de la Cerveza hubieron “inconsistencias” e “irregularidades”, pero que --como si fuera agua bendita-- no hubo delito.
Para ello se sirvieron del informe del Tribunal de Cuentas, ese mismo órgano al que cuestionaron en el tema sobresueldos de los Directores de la Intendencia, de modo que en un caso el oficialismo pensó que le servían sus conclusiones y lo citó a su favor y en el otro vio que estaba en su contra y lo atacó.
Y tanta importancia se dispensó a la existencia o no de delito, que en el marco de un debate muy postergado, la Intendencia no contestó, ni controvirtió que en la citada fiesta se perdió más de medio millón de dólares, según una cuenta rápida que realizó el edil interpelante y sobre ello, la respuesta, repetida, reiterada y anodina, fue que no había delito y que de otro modo el Tribunal lo debía denunciar “de oficio”.
Es obvio que este último punto lo decidirá la Justicia, ya que es el poder competente al que se concurrirá y que a la Junta le corresponde decidir si hubo responsabilidad del Intendente, como control constitucional del Ejecutivo departamental, ese mismo contralor que estuvo impedido por el cierre de la Junta por una mayoría que atropelló los derechos de las minorías y que quería evitarse a todo trance, como ya es de público conocimiento.
En el caso existe responsabilidad del Intendente y así lo dice el informe del Tribunal de Cuentas, al que se sujetaron y defendieron los colegas que tuvieron la misión de inmolarse en la plaza pública, para que el exintendente Bentos no presentara máculas para la campaña electoral y duro es señalar que, efectivamente, se incineraron asidos a un flotador --el informe del órgano controlador-- que para su ruina, los llevaba directamente al fondo del océano.
El Tribunal expresa categóricamente: “j) Los incumplimientos constatados conllevan la responsabilidad del Intendente como órgano delegante…” de modo que, la frazada les quedó corta, el mismo informe que defendieron los representantes del Intendente durante toda la noche, es el que acusa duramente a la Administración cuestionada, al señalar que el exintendente Bentos es responsable de los incumplimientos que los colegas llamaron, con cierta complacencia propia y ajena, como “inconsistencias” o “irregularidades”.
Ante tamaños epítetos pronunciado por los Defensores, que agravian cualquiera de las reglas de la buena administración (véase decreto 30/2003 del Poder Ejecutivo) y pulverizan cualquier imagen política y de una administración departamental, los ediles blancos se fueron a dormir tranquilos porque “declararon” y votaron que se encontraban “satisfechos” por las explicaciones dadas, ya que las cuentas eran exactas, prolijas y correctas, de modo que ni siquiera escucharon a sus propios compañeros, porque no quisieron oír lo que sus correligionarios les vinieron a confesar y por eso es bueno cooperar con ellos, para que refresquen su memoria: existen inconsistencias e irregularidades administrativas en la 48ª Semana de la Cerveza que arroja pérdidas por la escalofriante suma de medio millón de dólares y el responsable es el exintendente ahora propuesto para la reelección.
Doctor Enrique Malel
Edil del Frente Amplio