Opinion | 12 Abr En nuestra trayectoria, más que centenaria, hemos actuado permanentemente a favor de la difusión y preservación de la valiosa, valiosísima, historia sanducera. En el correr de los años las páginas de EL TELEGRAFO han difundido artículos de historiadores como Juan Pivel Devoto, Pbro. Baldomero Vidal, Augusto Schulkin, Antonio Comín, Carlos Estefanell, Miguel Angel Pías y tantos otros que resultaría casi imposible enumerar a todos.
Por otra parte, si bien somos conscientes de lo errático de la forma en que se “manejó” la historia sanducera en los últimos años, pudimos apreciar recientemente lo que parece evidenciar un cambio de actitud, en cierta forma una mejoría, ya que en la Semana de la Cerveza recientemente finalizada se pudo constatar en el Museo de la Tradición un evidente replanteo. Se notó claramente que hubo esfuerzo, disposición así como también conocimientos técnicos que parecían no existir. Sintetizando, se recuperaron carruajes y otras piezas, se agregaron elementos que estaban “en depósito” y se corrigieron varios de los muchos dislates que aparecían en la información brindada al público.
Lo expuesto precedentemente hace que nos sintamos obligados a lanzar una alerta ante un hecho puntual que difícilmente pueda repetirse.
Concretamente, el próximo sábado se realizará en Montevideo un remate en el que se pondrán a la venta numerosas piezas pertenecientes a la historia de Paysandú. Se trata del “Remate de armas antiguas, militaría, platería criolla y documentos históricos” que se realizará a las 16 horas del día indicado.
En el catálogo encontramos piezas que indudablemente se destacan por si mismas como: “Divisa en seda blanca con leyenda bordada en hilo celeste “DEFENSOR DE PAISANDU”, medidas: largo 45, ancho 8 cm. Enmarcada. Acuarela anónima artillería brasilera, en Paysandú y Paraguay”. Medidas 12 x 17 cm. Reproducido en el libro “La Guerra del Paraguay” de Boero”.
También se ofrece el Álbum familiar del General Leandro Gómez. El catálogo exhibe una enorme variedad de armas, muchas de las cuales están vinculadas con la historia sanducera y, en algunos casos con el Sitio de Paysandú. Los documentos que se venderán resultan en algunos casos sumamente importantes en la historia sanducera y especialmente en lo relacionado con la Defensa.
Transcribimos a continuación la descripción de algunos de estos documentos tomada textualmente del catálogo correspondiente:
“Documento firmado por el Sacerdote Domingo Cobas que escribe de Gualeguaychú el 21 de junio de 1855 y dirigido al Señor Presidente de la J.E.A de Paysandú, Don Benito Chain donde le comunica el aprecio por el querido pueblo de Paysandú en la que no pudo dar inicio al Templo y que le gustaría morir en Paysandú”.
“Documento dado en la Ciudad de Paysandú el 10 de octubre de 1864 referente a José Antonio Miguel Sargento de la Escolta del Sr. Comandante Militar del departamento Documento de seis carillas firmado por Pedro Rivero, Juan Díaz y Coronel Leandro Gomez”.
“Documento dado en Paysandú en mayo de 1864 y firmado por Pedro Rivero autorizando a un moribundo a contraer matrimonio”.
“Contrato con el profesor José Debali y la sociedad musical Garibaldi (seguramente es Sociedad Giribaldi) firmado en Paysandú el 04 de febrero de 1879. Firman José Debali, Ramón Rivero, Ángel Bossio y Dionisio Rombris”.
“Documento de 04 carillas de puño y letra del Coronel Leandro Gómez, jefe Político y de Policía Del Departamento de Paysandú cuando se hace cargo de la plaza y eleva informe de la condición de la misma”.
“Documento firmado por uno de los 33 Orientales, Manuel Freyre fechado en Paysandú el 28 de noviembre del año 1857 donde se relata todo lo que acontece en Paysandú inclusive los ingresos policiales, el sistema de producción agrícola ganadera del Departamento”.
“Documento del año 1826 donde Don Melchor Pacheco y Obes, Teniente del Tercer Escuadrón del Regimiento de las Milicias de Entre Ríos certifica haber nacido en Paysandú. Firmado por Solano García”.
“Estatuto Della Societá Italiana Di Mutuo Soccorso ‘Unione e Benevolenza’ Paysandú - 1918 -33 páginas”.
Creemos que lo mencionado, que no es el total de las piezas llevadas a remate, es suficiente para que lancemos un alerta sobre el hecho. Sin dudas consideramos que el Gobierno Departamental debería participar en el remate y, respetando el esfuerzo, los conocimientos y la inversión de los propietarios, sería deseable que adquiriera, en la medida de lo posible, las piezas de mayor valor histórico para Paysandú.
Quienes deben decidirlo han de tener en cuenta que hay piezas que podrán venderse en unos pocos dólares pero que “no tendrán precio” en la memoria colectiva de los sanduceros.