EN GUAVIYÚ

Locales | 06 May La empresa Vama Termal, que en junio pasado se hizo cargo del ex Villaggio Termal, fue conminada por la Intendencia a pagar 62 pesos por metro cúbico de agua termal, lo que “representa unos 130.000 pesos mensuales”, según dijo a EL TELEGRAFO una de las integrantes de la empresa, Patricia Dupont. Los Dupont tuvieron varios meses bajo su administración los moteles A y B que la Intendencia tiene en las Termas de Guaviyú, pero debieron rescindir el contrato al no poder asumir el pago de 25.000 dólares mensuales por el alquiler de la cincuentena de moteles. La Intendencia aceptó la rescisión, y contrató un gerente para administrar los moteles. Paralelamente, el ciudadano argentino dueño del ex Villagio Termal --ubicado del lado Sur de la Ruta 3-- ofreció a los Dupont la administración del complejo privado que tiene 150 camas entre habitaciones del hotel y los bungalows, por unos 8.000 dólares mensuales.
Hasta ese momento y desde hacía 15 años, el complejo privado recibía agua termal que se pagaba mediante canje de hospedajes y servicios hoteleros que eran usufructuados por la Intendencia cuando lo solicitaba, según un convenio suscripto entre el anterior administrador y la IDP. Los responsables de Vama solicitaron a la Intendencia renovar el convenio poniéndolo a su nombre, y allí la resolución del intendente Bertil Bentos de fines de febrero fue comunicar a los principales de Vama que no aceptaban el canje y que deberían pagar la suma de 62 pesos por metro cúbico de agua que recibieran. En el pozo termal de Guaviyú hay una bomba de agua que lleva el líquido hasta el complejo ubicado del lado Este de la Ruta 3, y un medidor para controlar el agua que consumen.

CORTARON SIN AVISO
“Acá cortaron el agua termal sin aviso”, dijo Dupont, “y nos dijeron los chicos de mantenimiento. Llamé a varios directores hasta que uno me dijo que fue por falta de pago del agua, pero nunca nos llegó una notificación de cuánto se debía por mes”. Al estar sin agua y tener este fin de semana largo completamente vendido en el complejo privado, “hice una entrega y se restituyó el agua. Y ahora quedamos en negociar porque a ese precio el metro cúbico es imposible pagar. Y si no es negociable, el emprendimiento no puede seguir y quedarían 20 personas sin trabajo”, advirtió Dupont, mientras se entrecortaba la entrevista telefónica porque el complejo estaba lleno de turistas y debía atenderlos.Retomado el contacto, dijo que “el precio del metro cúbico es un disparate, porque 130.000 pesos por mes de agua no se puede pagar”.
“Estoy esperando una reunión con el intendente (Mario Bandera) para plantear la situación y negociar, porque si ellos no aceptan el canje por alojamiento, sería solo con esta empresa, porque hace 15 años que está esa forma de pago”, aclaró.
Además del personal que trabaja allí, “reformé toda la cocina y tengo un hotel con comedor con un chef elaborando las comidas y la gente viene con pensión completa, y trabajamos con buenos servicios porque nos gusta trabajar en turismo”, explicó.
Lamentó que si debe “entregarle la llave al dueño porque el agua es muy cara se perdería esta atención en termas, porque el hotel es de un argentino que me dio la concesión porque no puede estar acá. Y nosotros lo tenemos a base de esfuerzo familiar, porque también están mis tías trabajando acá”.