A CAUSA DEL CLIMA Y LA INTERMEDIACIÓN

Locales | 07 May El buen clima de los últimos meses en el sur del país determinó que se juntaran las producciones de las chacras de Canelones y Montevideo con la que usualmente sale de Salto, por lo que “estamos encimados en producción y en consecuencia tenemos precios bajos”, dijo a EL TELEGRAFO Aquiles Mainardi, el presidente de la gremial Salto Hortícola, que nuclea a las organizaciones de productores salteños de la Asociación Granjeros de Salto, el Grupo Parada Viña, la Mesa Hortícola de Salto, la Sociedad Fomento Colonia 18 de Julio y la Sociedad Fomento Rural de Salto.
El dirigente explicó que “hasta ayer estábamos con todos los rubros en valores muy bajos para lo esperado”, lo que implica que “la rentabilidad está cayendo porque seguimos con valores de hace diez años y el dólar está a 27 pesos, y todos los insumos, excepto la mano de obra, son en dólares, que subió ocho pesos, y eso nos golpea muy fuerte”. A juicio del productor, “con los precios que tenemos estamos con números casi en rojo”, al tiempo que aclaró que esa situación “golpea más al pequeño y mediano productor, que no tiene tierra suficiente para hacer varias cosechas; si le sale mal una vez, se le va el año, mientras que el que tiene más área, puede escalonar su producción”.

PRECIO NO SE REFLEJA
Dijo que “cuando se encima la producción del norte con la del sur, tenemos una sobreproducción y como el sistema es de oferta y demanda, los precios no son buenos. Pero eso no quiere decir que el precio se refleje en el consumidor final. Lo vemos aquí mismo, en Salto, que teníamos boniato que no se vendía (por falta de demanda), pero al consumidor estaba entre 40 y 50 pesos el kilo; el tomate estaba al consumidor a 50 pesos el kilo y nosotros no podíamos vender una plancha de diez kilos a 200 pesos”, cuando ese valor era el 40% del precio que se vendía al público. Mainardi dijo que “hay que tener en cuenta que, normalmente, el consumidor final paga tres veces más el precio que recibe el productor. Porque, por ejemplo, ese tomate a 20 pesos es lo que pagan en Montevideo, a lo que hay que descontarle flete y comisión, por lo que al productor le llegan 14 pesos en el caso del tomate de primera y de buen tamaño, si es otra categoría son 10 pesos el kilo. Eso es lo que le quedaba líquido al productor estos días”. Cabe recordar que la producción que se realiza en el norte del país, particularmente en Salto, es bajo invernáculos porque es contra estación, particularmente entre mayo y setiembre, que determina costos más altos por la infraestructura necesaria, mientras que en el sur se planta “a campo”.

LAS DOS PUNTAS
Esta situación de desfasaje entre las dos puntas (productor y consumidor), “es muy difícil de controlar porque todos pueden remarcar, el único que no puede es el productor. Y hoy producir un kilo de tomate nos cuesta entre 15 y 16 pesos. El tomate y el morrón lo estamos vendiendo por debajo del costo, y hace 15 días no se podía vender (por falta de interés en los intermediarios) boniato ni zapallito. Y se puede decir que el precio al productor es bajo por la sobreproducción, pero esa baja del precio nunca se ve reflejada en el consumidor final, pese a que si el precio baja, todos vamos a consumir más, porque a menor precio, mayor consumo”. Si bien entiende que si se vendiera al público más barato para que el productor pudiera vender más volumen, la situación sería diferente, “eso es muy difícil de regular, porque los productores no incidimos y depende del mercado. Y nos molesta cuando dicen que la producción está cara y nosotros tenemos precios bajos, y el ama de casa compra el tomate caro y nosotros lo vendemos por debajo del costo de producción. Y uno entiende que el consumidor va a la verdulería, compra caro y lo que piensa es que el productor se está llenando de oro. Y uno lo pensaría también, pero no es la realidad”.

TIENEN VENTA DIRECTA
No todos los productores hortícolas tienen este problema, ya que “hay quienes venden directamente al supermercado, pero son dos o tres los que pueden hacerlo y no tienen el problema de los demás. Los que mandan al Mercado Modelo es imposible que tengan alguna regulación. El mismo gobierno no ha podido. Y en el caso de faltante de mercadería, que los precios se disparan, se habilitan las importaciones, pero no se controla que entre a precios razonables. Y nosotros como productores no tenemos las herramientas”. En resumen, “además de lo que pasa en la cadena de venta, (la situación de los productores hortícolas) está complicada por la sobreproducción y parece que al sur le queda producción para un mes y medio o dos meses más. Eso puede complicar a los productores más chicos, que no van a poder escalonar y hacer un promedio del año”, culminó Aquiles Mainardi.