Paysandú, Viernes 22 de Mayo de 2015
Locales | 16 May Una residencia universitaria estudiantil con capacidad para hasta 100 personas, con 32 habitaciones y varias salas de uso común en sus 2.800 metros cuadrados, es el nuevo emprendimiento que encaró el empresario sanducero Mario Macri, en la esquina de Leandro Gómez y Luis A. de Herrera, en lo que fuera un antiguo hotel construido en los 60 y que estuviera desocupado durante los últimos 14 años. La obra demandará aún algunos meses, pero ya estará habilitada para el comienzo del año lectivo universitario de 2016.
“Un poco por costumbre, un poco por la forma de ser a pesar de los años, porque siempre me gustó hacer algo que me pareciera positivo y beneficioso para la comunidad”, fue la justificación que dio Mario Macri para encarar esta obra en pleno centro de Paysandú, cuando una de las preocupaciones que hay es, precisamente, dónde se ubicarán los cada vez más estudiantes universitarios que llegan a Paysandú de otros departamentos.
UTILIDAD ESPECÍFICA
“Estaba para la venta el edificio del ex Nuevo Hotel Paysandú, que durante muchos años fue hotel, después fue cedido en préstamo al Instituto de Formación Docente mientras hacían el edificio de calle Florida. Después de más de un año de negociación, lo pudimos lograr con buena disposición de los propietarios al explicarles cuál era nuestra intención en caso de concretar el negocio”. Esa intención, según Macri, era que “además de reactivar un inmueble de mucho valor en un punto excepcional, se le pudiera dar una utilidad específica a un Paysandú que está creciendo en la instalación de universidades y centros de estudio de diferentes características; nos propusimos hacer una especie de hotel universitario. Ante la falta de ofertas de propiedades, casas para alquilar o residencias universitarias, nos propusimos como una posibilidad cierta y sustentable la viabilidad económica de instalar un residencial universitario con características de un hotel específicamente para estudiantes universitarios. Y en eso estamos”.
Recordó que “hace unos cuantos meses que venimos trabajando, intentando readecuar el edificio con las comodidades propias de un hotel de buen nivel, con una capacidad de entre 70 y 100 estudiantes para que pudieran acceder a través de una mensualidad razonable de acuerdo con los costos, y también creyendo que tanto los organismos de apoyo a la educación como las intendencias pueden estar interesados”.
“Hemos hecho contactos con autoridades y gente vinculada con el quehacer universitario y se nos dijo que era algo que realmente Paysandú necesitaba y que creían que podían viabilizar por la vía de becas o apoyando a los estudiantes con un porcentaje del costo de la mensualidad, para que pudiera hacerse realidad la puesta en marcha de este proyecto”.
El proyecto tiene la declaratoria de “Interés departamental” por la Intendencia y la Junta Departamental de Paysandú.
SIETE MESES DE REFORMAS
Sobre las reformas que se están haciendo, el empresario dijo que “comenzamos con una idea, pero nos resultó muchísimo más complejo, ya que por el tiempo que pasó esa propiedad en desuso, unos 14 o 15 años, se deterioró. Quedó la fachada clásica y muy linda, pero hubo que arreglar pisos, techos, humedades, cañerías, instalación eléctrica, en lo que está trabajando un número importante de trabajadores y diferentes empresas. Hace siete meses que estamos tratando de reacomodarlo”.
Consultado sobre cuánto se invertirá en el proyecto, dijo que “mucho más de lo que habíamos previsto, además del valor de costo de la propiedad. En sus 2.800 metros cuadrados construidos con tres plantas, hicimos comedores, salas de esparcimiento y de computación, dos salas de descanso, y es un proyecto que tendrá las comodidades de un hotel: cada habitación con baño privado, ventilador de techo y heladera. También tendrán servicio de wi-fi, aire acondicionado, cámaras de vigilancia, seguridad y salas independientes para estudios. En el mismo edificio habrá “servicio de lavandería, habrá lavadoras y secadoras automáticas que funcionarán con fichas, y también una sala de planchado”. Si bien no dio la cifra invertida, dijo que “es muy importante, porque además del arreglo de la infraestructura, está todo el amueblamiento, televisores, equipos de aire acondicionado, calefones, computadoras y cámaras. Es una inversión importante”.
Afirmó que “la gran ventaja es que está en el corazón de Paysandú, al alcance de las universidades --excepto la de Agronomía, que está en la ruta 3-- tiene líneas de ómnibus, comercios, supermercados, rotiserías, todo lo que hace a las necesidades de los estudiantes. Y también tenemos previsto que, además del alojamiento, se pueda ofrecer otro tipo de mejoras al servicio, como puede ser almuerzos o cenas a precios accesibles, en un conjunto de instalaciones que podemos brindar en nuestro shopping, que está nada más que cruzando la calle para que con un precio accesible puedan tener también la alimentación”.
DE DOS A CUATRO CAMAS
De todas maneras, los estudiantes “van a tener cocinas, heladeras, parrilla y comedor con suficiente amplitud”. En cuanto a las habitaciones, Macri dijo que “habrá habitaciones desde dos hasta cuatro camas para lograr una mejor accesibilidad y que lo puedan pagar, porque las hay de buen tamaño con todas las comodidades. Eso dependerá de las posibilidades y las necesidades específicas que pueda pagar cada uno”.
La idea es que sea “una locación mixta, tanto para varones como mujeres, pero con la supervisión y dirección de una organización; aunque no es nuestro oficio la hotelería o residencias, ya hemos recorrido y recibido información sobre reglamentos de funcionamiento interno para dar solidez al manejo de estos grupos de 70 u 80 jóvenes”. Probablemente trabajen para la residencia más de diez personas cubriendo las 24 horas.
Por otra parte, entiende que “podemos encarar esta tarea porque en todo el complejo de nuestra empresa tenemos una organización de servicios a través de los albañiles, electricistas, soldadores, pintores y técnicos, por lo que tenemos la posibilidad de hacer los trabajos a un costo sensiblemente menor. Pero, sin duda, se han contratado empresas porque por el volumen era imposible que lo asumiéramos en forma individual”.
Como hecho interesante, el sistema de servicio de agua tiene dos depósitos diferentes y dos tuberías. Es que habrá un servicio de agua de OSE, que se depositará en tres grandes tanques en el techo, y habrá otros tres donde se juntará, después de filtrarla, el agua de lluvia que será recogida por un sistema de canaletas dirigidas. Con esta agua no potable se surtirán los más de 50 servicios sanitarios que están instalados en los baños privados y comunes.
Sobre si será algo vinculado con la residencia en el salón de la planta baja, en la esquina, dijo que “no es la idea y ni siquiera lo hemos puesto en alquiler, pero seguramente lo haremos para alguna actividad comercial, y entre el subsuelo y la planta baja tiene 800 metros cuadrados”.
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