Rurales | 24 May Los productores lecheros de Artigas, Salto y el norte de Paysandú, agrupados en la Sociedad Rural de la Industria Lechera de Salto (Sofrils), expresaron a través de un comunicado que los nuevos dueños de Indulacsa “han demostrado una total falta de sensibilidad bajando el precio de la leche en un momento muy complicado para los tamberos”.
En las últimas horas, la empresa Indulacsa, ahora propiedad del grupo francés Lactalis, confirmó a sus remitentes una baja de precios retroactiva al 1° de mayo --hubo otra antes-- y, en los hechos, redujo más el precio que otras empresas.
Denuncian que “unilateralmente dejaron sin efecto un acuerdo que tenían con Sofrils de discutir previamente cualquier cambio en el precio de la leche”, por lo que los tamberos advierten que “esta situación lleva a un debilitamiento de la cuenca con repercusiones gravísimas para los productores y las instituciones”.
A su vez, Sofrils reclamó al gobierno que exija a estas empresas multinacionales que llegan a instalarse a Uruguay “un real compromiso de desarrollo de las cuencas que trabajarán aportando capital. Las últimas experiencias fueron negativas, dejando a productores y funcionarios a la deriva” (en una clara alusión a la salida del país de Ecolat, que era del grupo peruano Gloria).
A la vez, reclamaron al gobierno “urgentes medidas financieras que contemplen a la lechería para evitar que los tambos entren en un endeudamiento fiscal y comercial muy grande”. La seca obliga a los tambos a mantener el ganado sobre la base de concentrados y raciones, elevando los costos de producción cuando los precios caen; muchos tambos perdieron las reservas forrajeras que tenían para el invierno y, en otros casos, ya se están consumiendo por la falta de forraje.
Sofrils demandó “una revisión profunda de las tarifas públicas (principalmente combustibles y energía eléctrica), convertidas hoy en uno de los costos más importantes de esta actividad, que deja al Uruguay afuera de la competitividad internacional. Las tarifas aplicadas por UTE no se ajustan a los horarios normales de ordeñe”, sostienen los productores. A los consumidores, los tamberos les piden tener la tranquilidad de que los precios no se verán afectados frente a la seca. “El productor lechero, por experiencias adquiridas, asume que la única salida frente a la crisis es producir más”, pero Sofrils dice que “en estas condiciones esa premisa pierde validez”.

AYUDAS
Desde las gremiales lecheras, los tamberos intentan apurar las ayudas económicas para continuar produciendo y poniéndole el pecho a la seca. El precio que recibió el productor en abril por el litro de leche remitido fue U$S 0,34 (promedio), valor que representa un 26% menos frente a igual mes de 2014, según los datos estadísticos del Instituto Nacional de la Leche (Inale). Los U$S 0,34 por litro de leche representan para el sector el valor más bajo que hayan recibido los productores desde diciembre de 2010.