Rurales | 24 May La 45ª edición de la tradicional Marcha funcional de caballos criollos, denominada este año “Horacio Castells Montes”, transcurre normalmente por los caminos del departamento de Salto, con algunos abandonos a causa de las altas temperaturas y con las expectativas de qué sucederá a partir del martes, luego del descanso de mañana.
El eje de la marcha es la Agropecuaria de Salto, desde donde todos los días, tanto de mañana como en la tarde, parten los participantes de la prueba para recorrer los kilómetros de cada etapa, procurando cubrir los 750 kilómetros del recorrido total en los 15 días de la prueba.
Partieron 99 participantes --récord en la historia de la prueba en el país--, pero quedan 90 tras los abandonos registrados en la semana a causa de las altas temperaturas. De todas maneras, se aguarda con expectativa que el anunciado descenso de temperatura para esta semana permita mejorar el estado de los caballos. Primero fue la yegua de cabaña “El Retobado” de Juan Ignacio Duvos, que sufrió un golpe al llegar a la concentración y debió ser asistida por los veterinarios de la prueba, por lo que no participó desde el inicio de la Marcha.
Luego, en la cuarta etapa, dos yeguas abandonaron la prueba. “Golodrina Bagual” de cabaña Los Baguales de Miguel Larriera y “Caramba Ibirapitá” de cabaña Ibirapitá de Correa Hnos.
Posteriormente, se sumaron cinco animales: “Namuncura 6” de cabaña El Talita de Souza Echenique Hnos., de Durazno, “Tomasa” de cabaña El Bagual de Abel Elhordey e Hijos, “Parda Cahel” de cabaña La Palma de Gonzalo Pepe, “Inver Tacuara LPH 92” de cabaña El Carobal de Juan y Dolores Soler y Martín Tafernaberry, y “Josefina de la Cueva” de cabaña El Carobal.
El viernes dejaron la marcha dos yeguas de la categoría menores. Fue un ejemplar de cabaña “Ibiray” de Enrique Blasina y otra de cabaña “La Cartuja” de Ignacio y Santiago Cortina.
Los participantes sanduceros continúan sin inconvenientes hasta el momento. Hay dos ejemplares de “Local Viejo” de Denisse Dolz, uno de cabaña “Sarandí” de Sucesores de Carlos A. Dolz, dos animales de “El Rumbo” de Gustavo Souza, uno de “La Paraguaya Nueva” de Sucesores Alba Souza y otro de “María Cecilia” de Eduardo Mattiauda.
La Marcha de Criollos es la prueba más importante de la raza en Uruguay, que reúne a gran cantidad de cabañas y departamentos, tal como quedó demostrado en la convocatoria para la prueba, que cuenta desde su inicio con 64 competidores en la categoría para animales mayores de 7 años y 35 en la de menores.

GUAPEZA Y RUSTICIDAD
La prueba, en donde se exhibe el poder de recuperación, guapeza y rusticidad del Criollo, es la única donde los caballos recorren 750 kilómetros en 15 días con un mes previo de concentración solo a pasto y agua en común. Las 8 primeras etapas (hasta hoy inclusive) fueron con tiempos regulados en dobles jornadas, ajustando las cargas y exigencias estratégicamente. La jornada de mañana será la única de descanso, para dar paso luego a la definición que comienza el martes con la denominada “lima sorda”, etapa en la que muchos quedan por el camino, porque deberán recorrer 50 kilómetros en la mañana y 30 de tarde en menor tiempo que las etapas anteriores de similar distancia.
La primera etapa libre será el jueves 5, con 30 kilómetros de mañana y 20 en la tarde, el viernes 6 son 50 kilómetros en la mañana y 20 en la tarde; el sábado 7 es controlado y, finalmente, el domingo se disputan los últimos 40 kilómetros libres para finalizar la Marcha.