Nacionales | 01 Jun El 52% de los empleadores no está satisfecho con el nivel de conocimiento que tienen los jóvenes que se incorporan a sus empresas. En tanto, solamente un 9% está “muy satisfecho”, estos datos fueron revelados por una encuesta realizada por la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Uruguay (CNCS).
La encuesta, denominada ‘Cualidades requeridas para contratación de personal’, fue realizada durante los meses de marzo y abril de 2015 e involucró las respuestas de 366 empresarios, por lo que su nivel de confianza alcanza el 95%.
Ana Laura Fernández, asesora económica de la CNCS, señaló que se intentó ante todo discernir con qué grado de habilidades blandas --atributos relacionados con la parte emocional, la conducta, las motivaciones, valores y cultura-- los empresarios perciben que los jóvenes ingresan al mercado laboral, según informó El Observador.
Fernández explicó que estas primeras cifras tienen que ver con el grado de conocimiento técnico o académico de los nuevos empleados, más allá de la experiencia que pueden traer de trabajos anteriores. Además, cuando se les preguntó a los empresarios cuán preparados para ingresar a la empresa se encuentran los jóvenes hoy, el 54% respondió que “están nada preparados o muy poco preparados”.
Lo que se midió en la encuesta fue una mezcla entre los conocimientos académicos y las habilidades blandas, ya que el concepto “preparación” es muy amplio. Para medir las habilidades blandas, la encuesta presentó a los empresarios una lista con algunas de estas y ellos debían elegir cuáles eran las más importantes a la hora de elegir personal. El 96% señaló que la más necesaria era la responsabilidad, seguida por la capacidad para aprender cosas nuevas (92%). Por su parte, entre las menos importantes, un 9% eligió el manejo de conflictos.
Otras habilidades que se incluían en la lista eran: trabajo en equipo, comunicación efectiva, iniciativa, adaptabilidad y resolución de problemas. La encuesta también destacó que la responsabilidad es la habilidad más demandada por los empresarios, pero la menos presente entre los jóvenes. A esta le sigue la iniciativa y la resolución de problemas. En tanto, cuando se les preguntó a los empresarios sobre el nivel de capacitación de los jóvenes según las necesidades de la empresa, un 67% respondió que la presencia de una segunda lengua es el aspecto donde la capacitación insuficiente más se hace sentir. Las nuevas tecnologías son el aspecto donde más se destaca la capacitación suficiente.
La falta de preparación de los jóvenes es una preocupación para los empresarios desde hace años, señaló Fernández. Agregó que desde 2009, la CNCS trabaja para acercar el mundo del trabajo al de la educación, ya que lo ven como el único camino posible para salir de este trance. “Si tenemos mano de obra, mejorará la producción y ahí está la preocupación”, dijo.
Casi 9 de cada 10 empleadores (87%) contestaron que si los jóvenes tuvieran las habilidades requeridas, su producción se incrementaría. “Si nosotros queremos seguir creciendo, un elemento fundamental es contar con mano de obra capacitada”, añadió Fernández.
La preocupación de los empresarios está fundamentada en los resultados educativos de los últimos años. Según el monitor educativo de Secundaria, en 2013, el 55% de los alumnos inscriptos en sexto de bachillerato no aprobó el curso.
De estos, un 46% no volvió a matricularse en 2014. Fernández aseguró que se trata de “un problema-país”. “El país ha crecido mucho y los avances tecnológicos son muy rápidos, entonces hay necesidad de contar con mano de obra calificada”, sentenció.

COMERCIANTES CONSIDERAN “RIDÍCULA” LA LEY ANTITABACO
El presidente de la Asociación de Quioscos de Uruguay, Claudio Orrego, señaló que la ley antitabaquista uruguaya es “ridícula” y fomenta el comercio ilícito de cigarros, lo que, a su juicio, contradice la campaña de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Día Mundial Sin Humo, que se celebró ayer.
“El Gobierno aumenta los impuestos pensando que así la persona que tiene un vicio va a dejar de fumar, pero lo que sucede es que esa persona que no tiene los recursos va a comprar el cigarro ilegal, más barato”, afirmó Orrego, en alusión al aumento del impuesto gravado sobre los cigarros el pasado enero.
La consigna de la OMS para la fecha que simboliza la lucha contra el tabaquismo este año es: “Alto al comercio ilícito de productos de tabaco”, según informó la Agencia EFE. Para Orrego, la OMS acertó en su llamamiento una vez que la comercialización de cigarros ilegales ha registrado un aumento en los últimos años, con productos todavía más nocivos para la salud por no cumplir “absolutamente ninguna normativa sanitaria”.
Por el Día Sin Humo, la Asociación de Kioscos y Subagentes de Quinielas de Uruguay emitió un comunicado en el que menciona estudios de la consultora internacional IPSOS, que apuntan a “un aumento del 20% en la incidencia del contrabando en todo el país, de un 25,3% en 2010 a un 31,2% en 2013”.
De acuerdo con el comunicado, la situación se agrava en los departamentos que hacen frontera con Brasil, en donde “8 de cada 10 fumadores fuman cigarrillos que están al margen de toda regulación y no pagan impuestos”.
Uruguay cuenta desde 2006 con una estricta legislación antitabaco promovida por el presidente Tabaré Vázquez durante su primer gobierno, a partir de un sensible aumento de los impuestos sobre productos del tabaco.
En enero de 2015, bajo la presidencia de José Mujica, se incrementó el gravamen sobre el tabaco por primera vez en los cinco años de esa legislatura mediante el aumento del Impuesto Específico Interno (Imesi).
Los comerciantes aseguraron que esto ha provocado un aumento del contrabando de tabaco debido a que una cajilla que cuesta en torno a 80 pesos en un comercio homologado, en el mercado ilegal se puede obtener por alrededor de 25 pesos.
“De una caja de 20 cigarros, el costo de 16 van para el Gobierno, los otros cuatro restantes equivalen a lo que se distribuye al comerciante, al distribuidor y a la industria. Ahora el cigarrillo ilegal no cumple ninguna norma, no paga ningún impuesto, es un flagelo para el propio Estado”, subrayó Orrego.
Para el representante de los comerciantes, el gobierno “está atacando a la economía nacional y fomentando el comercio ilícito con una política de impuestos excesiva”.
“Es una campaña ridícula. Apoyamos la iniciativa de la OMS, que hace algo respecto al real problema mientras el gobierno solo se preocupa con el comercio legal”, subrayó.
A su juicio, las políticas deberían concentrarse en campañas educativas en las escuelas, que involucren a profesores, padres y estudiantes, desde niños a adolescentes, para prevenir la aparición de “nuevos fumadores”.

RÉCORD EN EXPEDICIÓN DE PASAPORTES
En Uruguay se expiden 600 pasaportes por día. Las autoridades de la Dirección Nacional de Identificación Civil (DNIC) señalaron que no dan abasto. En 2014 se llegó a un récord de 80.000 documentos expedidos, más que durante la crisis de 2002. Y esperan superar ampliamente esta cifra en diciembre. De cara al próximo presupuesto ya pidieron más funcionarios, pero todavía no recibieron una respuesta. Por ahora, agregan horas o días extras de trabajo, mientras la gente, impaciente, se ve obligada a hacer largas filas, según informó El País.
El director de la DNIC, Ruben Amato, señaló que desde abril de 2014 viven una situación por demás atípica, que se profundizó en marzo pasado. Antes expedían entre 220 y 240 pasaportes por día en las oficinas de la calle Rincón, desde hace dos meses la cantidad es de 300. En el Interior pasa lo mismo, se entregan unos 300 pasaportes diarios. En total son 600 documentos por día: o sea 12 mil cada mes. La cifra habitual era, hasta mediados del año pasado, de 7.800. Amato señaló que los funcionarios no le preguntan a quienes van para qué quieren el pasaporte, dice suponer por “conversaciones informales” que ha mantenido con gente en las largas filas que suelen formarse y con quienes trabajan en el aeropuerto, que “más del 90% saca su pasaporte por viajes de placer”.
De los 300 pasaportes que entregan en Montevideo por día, 50 son urgentes, o sea que se entregan en 48 horas en vez de, como máximo, 29 días, y cada uno cuesta 4 UR (3.263 pesos) en vez de 2 UR (1.648 pesos). En caso de que no sea una renovación y se trate de la primera vez en que se hace el trámite, los costos son de 4.854 pesos o 2.427 pesos.
En tanto, Amato advirtió que se expide esa cantidad de pasaportes porque es el máximo que pueden entregar. Si dieran más números, “se darían más”. La cantidad de funcionarios y las horas que trabajan, desde las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde, permite entregar ese número de documentos y no más. Por eso, Amato ya pidió al Ministerio del Interior más funcionarios.