Locales | 05 Jun Unos 70 trabajadores pertenecientes a empresas tercerizadas por Ancap que cumplen tareas de producción en la planta de Portland se instalaron frente al horno del ente, donde reclaman contra el envío al seguro de paro de cuatro trabajadores y rechazan la sustitución de puestos de trabajo.
Los delegados de la empresa Mársico, Carlos Monroy, Miguel Núñez, Pablo García y Oscar Mendieta, coincidieron en señalar que continuarán allí hasta obtener una respuesta de la petrolera estatal y la tercerizada, que “la semana pasada comunicó el envío de cuatro operarios al seguro de paro, ante un descenso en la producción provocada por la rotura de un horno de Ancap”.
Los delegados entendieron que no había motivo, en tanto la producción continuaba y se daban las condiciones para continuar. “La empresa cobra un plus por el ente, incluso Ancap en su pliego de condiciones exige que el personal debe permanecer a la orden ante cualquier rotura”, dijo García a EL TELEGRAFO.
Tras consultar con dirigentes del Sunca, decidieron continuar las conversaciones a otro nivel y entrevistarse con jerarcas del organismo. “Nos recibió la jefa de producción, quien apoyó la decisión empresarial y sumado al despido de cuatro trabajadores en Minas, se paralizaron las obras allí, en Paysandú y Manga. Llama la atención que Ancap no manifestó su voluntad para solucionar este conflicto que involucra a ocho trabajadores, de los cuales tres no tomaron su licencia y por eso exigimos a la empresa que antes del envío al seguro de paro, le otorgaran ese beneficio y analizar otras soluciones para el horno durante ese tiempo”, añadió.
De acuerdo al delegado, “la empresa argumenta que no tiene dinero para pagar las licencias y por esa razón le reclamamos al ente que exija a las empresas que cuenten con la solvencia necesaria”, destacó.
PÉRDIDAS MILLONARIAS
A comienzos de la semana se trasladaron a Montevideo para dialogar con integrantes del directorio de Ancap. “Estuvimos lunes y martes y no nos atendieron, sino que a última hora del lunes nos recibió un jefe de recursos humanos que no tiene poder de decisión. Esta persona nos entregó una documentación donde se establece un preacuerdo entre la Federación Ancap y Ancap, firmado el año pasado, donde ese sindicato le pide que retome personal en las áreas donde nos desempeñamos nosotros. Allí se detalla el recorte de las empresas privadas con la finalización de las licitaciones, la realización de un llamado y si en nuestro caso no aprobamos esos concursos, quedaríamos sin trabajo en forma automática. Por eso decimos que existe un gran trasfondo, donde las pérdidas ante la falta de venta de portland se calculan en torno a U$S 2 millones en la última semana”, resaltó García.
Asimismo, remarcó que a pesar de los perjuicios constatados en el organismo, “llama la atención que no haga nada, mientras tienen las tres plantas paradas desde hace más de una semana y sin vender cemento. Desconocemos su intención, en tanto no aceptaron nuestras propuestas”.

FUENTES LABORALES
En Paysandú hay unos 70 operarios movilizados y acampados frente a la planta, donde se reúnen diariamente. Núñez recordó que en instancias anteriores se diagramaron concursos para tecnólogos químicos o profesores, en tanto entre los trabajadores que cumplen con la producción, “son pocos los que cuentan con Ciclo Básico completo. Sin embargo, tienen una experiencia de más de veinte años de trabajo en la planta –y más de 40 años de edad-- porque en aquel entonces no se pedían otros requisitos. Reclamamos nuestros derechos y defendemos la fuente de trabajo porque hemos dejado nuestras vidas allí. Si el personal lleva más de veinte años de trabajo y siempre salió la producción, eso quiere decir que la gente sirve”, subrayó.
García reconoció que esta medida de recortes se enmarca en los anuncios efectuados desde el Ministerio de Economía.
“La ley establece el ingreso a la función pública a través de concursos y creemos que se deben cambiar algunos aspectos, de lo contrario, no se cumpliría con lo que se predica de justicia social”, precisó.
Por su parte, Mendieta recordó que los operarios afectados al área de ensacado participaron en concursos internos, “previo a la incorporación de nuevas tecnologías que aprobamos por una empresa italiana capacitadora. Ancap nos preparó y dio tareas en ese lugar específico con ocho maquinistas que concursaron en su momento”. Monroy precisó que en su mayoría cumplen tareas relacionadas a la producción, tanto en trituración o ensacadora, por tanto cuentan con el apoyo del Sunca con sus ramas anexas, entre otros gremios.
Hoy se trasladarán a Montevideo, para reunirse en la sede de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) con la tercerizada y Ancap.