Paysandú, Viernes 12 de Junio de 2015

LA VESTIMENTA ES EL PRINCIPAL
RUBRO DE CONTRABANDO

La “cultura” del contrabando preocupa al Centro Comercial e Industrial de Paysandú

Locales | 09 Jun El gerente del Centro Comercial e Industrial de Paysandú (CCIP), Luis Pedro Rodríguez Fraschini, dijo que el principal rubro que se ve afectado por el contrabando es la vestimenta, pero se mostró también preocupado por “la cultura que genera en los trabajadores” y en los jóvenes el comercio informal.
Rodríguez se reunió con el director nacional de Aduana, Enrique Canon, donde “nos pusimos al tanto de las disposiciones que está tomando la Aduana en la frontera, tanto por el río (Uruguay) como con Brasil, para mostrarle nuestra predisposición para trabajar en conjunto y regionalmente atacar el informalismo y el contrabando. Es complicado, pero hay que laburar y él se mostró muy dispuesto”.
Señaló que “en Paysandú el problema con la mercadería de frontera ha bajado y por suerte, porque también la economía nuestra está en disminución y al emparejarse un poco la diferencia cambiaria hizo que no haya tanto trasiego”. En cuanto a si hubo algún planteo específico para Canon, dijo que “no, el planteo es trabajar en conjunto para que se pueda hacer de la mejor manera. La Aduana hace lo que le corresponde y nosotros trabajamos para la formalidad de los comercios, que es importante; además estamos trabajando con los centros comerciales de la frontera para generar propuestas para los comercios que hoy --con los costos de nuestro país-- están complicados para subsistir, y que el gobierno nacional mire de otra manera realidades que son distintas”.

“PROTEGER LO FORMAL”
En cuanto a cuáles son los planteos que hacen los asociados al CCIP, dijo que “los socios siempre tienen preocupaciones y pueden mandar una nota o avisar que algo está pasando o que vieron determinada situación. Se trabaja en conjunto y se denuncian casos de distintos rubros, porque siempre hay diferencias entre los rubros. No denunciamos a nadie en particular, sino que estamos tratando de proteger al que está formal y cumpliendo con todas las reglas para poder trabajar, y eso pasa en toda la frontera, no solo en Paysandú, porque Salto, Artigas, Bella Unión y ahora Rivera y Cerro Largo viven una situación caótica. Pero no hay que solamente quejarse, sino también buscar propuestas y apoyar al gobierno nacional para que mire las realidades y sepa cuáles son, y podamos tener forma de salir adelante”.
Afirmó que “estamos en completo contacto” con los demás centros comerciales de la región, y que “la semana pasada estuvimos reunidos en Montevideo en la Confederación Empresarial del Uruguay (CEDU), donde estuvimos los 19 centros comerciales reunidos con el ministro Ernesto Murro, tratando fundamentalmente problemas del Interior. Él está muy abierto a trabajar con el Interior, y eso tenemos que aprovecharlo. Vamos a aprovechar a reunirnos con todos los ministerios; el Interior en su conjunto está tomando fuerza como para encarar temas que son similares, porque cada departamento tiene su punto, pero hay realidades del conjunto”.
En cuanto a la medida del presidente Tabaré Vazquez de atacar frontalmente el contrabando de cigarrillos, el funcionario del CCIP dijo que “todo lo que sea atacar la ilegalidad es bueno y él está muy enfocado en la parte de salud”.

LA VESTIMENTA
Consultado sobre cuáles son los rubros que se ven más afectados por el contrabando en Paysandú, Rodríguez dijo que es “la vestimenta. Pero lo que más preocupa del contrabando es la cultura que genera en los trabajadores, aquel que está al día en todo ve que su rentabilidad no es la misma que el que está informal. Y esto también genera en los jóvenes una cultura de trabajo distinta; hoy el eslogan del Ministerio de Trabajo es 'la cultura del trabajo para el desarrollo' y tenemos que comenzar por ahí, mejorar esa cultura”.
No obstante, entiende que hubo una disminución de la mercadería ilegal desde la implantación del cero kilo, y puso como ejemplo que “en Salto se hizo un estudio por una universidad sobre lo que afecta el cero kilo y demostró el efecto positivo en el microcomercio, en la periferia, en los boliches de barrio que vieron una mejoría en sus veantas. Eso es muy rescatable, el cero kilo ayuda”. Sobre si lo que pasó en Salto es trasladable a Paysandú, dijo que “sí, totalmente, tenemos la misma realidad y somos hermanos en muchísimos temas”.


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