Paysandú, Martes 23 de Junio de 2015
Locales | 17 Jun El paciente que era portador de la bacteria Klebsiella pneumoniae Carbapenemase (KPC) y que falleció ayer como consecuencia del problema de salud que tenía previamente, “era un paciente que estuvo en el CTI del hospital hace meses, y luego pasó a sala general porque el Juzgado era quien debía definir quien tenía que hacerse cargo de él, ya que estaba alejado de su familia y estaba solo desde hacía dos meses”, explicó a EL TELEGRAFO el director del Hospital Escuela del Litoral, químico farmacéutico Fernando Rodríguez.
El jerarca explicó que “como el paciente estuvo mucho en el CTI, intubado, tratado con antibióticos, generó una multirresistencia en toda la flora bacteriana, y al estar con la inmunidad baja y con resistencia a los antibióticos, la bacteria KPC lo afectó seriamente, como puede ocurrir en los casos de pacientes inmuno deprimidos, y normalmente no ocurre con cuerpos sanos y acostumbrados a defenderse de las bacterias. En este caso era un paciente con historial complicado y pronóstico incierto”.
Rodríguez explicó que “pese a que se le hicieron cuatro cultivos y ninguno dio positivo a la bacteria (como un peligro de contagio), por el protocolo del Ministerio de Salud Pública en estos casos (que es portador aunque no afectado) se dispone que debe estar un año aislado del resto de los pacientes que tienen disminuidas sus defensas”. Algo similar pasó con un paciente que también presentó la bacteria cuando estaba internado en la sala de Tratamientos Intermedios, donde se lo mantuvo aislado durante dos meses y después pasó a sala.
ATENCIÓN NORMAL
En estos casos, “no requiere de CTI ni elementos especiales para su cuidado, simplemente queda internado en una sala aislada de otros pacientes que puedan estar con inmunidad frágil y los funcionarios que lo atienden, que normalmente se trata de ayudarlo a higienizarse y darle de comer, trabajan con material estéril y vestimenta descartable que se utiliza para que eventualmente la bacteria no se distribuya. Y en este caso a Guichón junto con el paciente fue material descartable para que el personal utilizara por los primeros 10 días”.
Con respecto a estos casos de la bacteria KPC dijo que “puede presentarse en casos de pacientes que tienen las defensas bajas, como la mayoría de quienes están en el CTI, y muchos de los que están internados en salas del hospital por problemas respiratorios, tan comunes en esta época del año”.
Afirmó que una vez que se adquiere, la bacteria “pasa a ser parte de la flora bacteriana, pero no necesariamente es contagiosa. Sí puede contagiar en caso de una infección, por ejemplo por un corte mal curado en la piel que se infecta, porque la bacteria que prevalece y coloniza la herida es la KPC. En ese caso el contacto con la persona infectada puede contagiar, no necesariamente de otra manera”, detalló. Dijo que la bacteria “puede estar en los billetes que tocamos diariamente, o cualquier pasamanos, pero al no tener defensas bajas no nos afecta tanto. Por eso es bueno lavarse las manos continuamente”.
SE PUEDE EN GUICHÓN
Explicó además que el centro hospitalario de Guichón está en condiciones de atender este tipo de pacientes, que por seguridad debe permanecer aislado, ya que, por ejemplo, los afectados no tienen requerimiento de oxígeno central u otros tratamientos más delicados que no se cubran en el nosocomio de Guichón.
En este sentido, además, la decisión fue tomada por la gerencia de la Regional Norte de ASSE, a cargo del médico Richard Millán.
Dijo también que como “cada sala del Hospital Escuela del Litoral tiene seis camas, por cada paciente que por cualquier razón deba permanecer aislado habría cinco camas desocupadas. Al haber ya otro paciente en condiciones similares de portar la bacteria KPC, y ocupar una sala completa como dice el protocolo del MSP, el hospital no podía utilizar otra sala de sis camas para un solo paciente, dejando diez camas sin poder ser utilizadas justo cuando hay tantos casos de internación por problemas respiratorios, como hay normalmente en esta época invernal. Por eso se lo envió a Guichón, donde el paciente puede estar solo en una sala, ya que la demanda de camas es mucho menor que en Paysandú”.
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