Rurales | 24 Jun El ingeniero agrónomo Esteban Montes, técnico del Instituto Plan Agropecuario, estima que el sector agropecuario está en condiciones de superar los 12 millones de cabezas de vacunos, cifra similar a la registrada en 2004-2005.
“Nuevamente, nos vamos acercando a la mitad del año, momento en que los productores hacen la declaración jurada de sus animales y desde Plan Agropecuario hacemos la proyección para estimar y 'olfatear' cómo viene la cosa para enfrentar el invierno”, dijo el profesional.
Entiende que la situación es de oportunidad, “porque el sector primario está en condiciones de mantener una faena del orden de los 2.500.000 cabezas sin problemas de disminución de stock y tampoco de vacas de cría”.
De todas maneras, sostiene que la “amenaza puede ser en el corto plazo, porque venimos de un verano lluvioso, con producción de pasto por encima de lo normal, se aumentó la carga y la seca de otoño hizo perder el crecimiento de las pasturas naturales de esa época”. Por lo tanto, el pasto con el que se ingresa al invierno es de verano, que se seca con las heladas y pierde calidad. “Además, los mejoramientos se han atrasado debido a la seca, por lo tanto las invernadas están atrasadas”, dijo Montes.
La gran pregunta parecería ser “¿realmente hay el suficiente aceite para que la cadena de carne bovina funcione correctamente como para responder y aprovechar este momento en que el sector primario está preparado con todos los cartuchos?”.
Durante 2014, el stock fue de 11.800.000 vacunos y 7.500.000 lanares. Para el técnico, “la cuenta sigue siendo la misma. Con 2.800.000 o 2.900.000 terneros que ingresan al rodeo, mortandades de 300.000 a 350.000 cabezas y extracciones que alcanzan los 2.200.000 animales (con exportación en pie), se producen aumentos del stock de 300.000 a 400.000 cabezas por año, como ha sucedido”.
Sostiene que “es un stock criador, con un porcentaje de vacas de cría sobre el stock total del orden del 36%, aunque igual estamos lejos de países como Australia, que tienen 51%. Pero está de más decir que está bien tener una buena máquina de producción. Además, hay una buena cantidad de vaquillonas, asegurando la reposición, por lo tanto tampoco es un problema que aumente la faena de vacas si esto se produce”. Respecto a la perspectiva de los novillos, Montes indicó que “se viene de años en que el stock total de novillos de 1-2, 2-3 y más de 3 años estaba en el mínimo histórico. En 2014 se comenzó a recuperar y ahora, en 2015, se espera que siga recuperándose”.
“Tomando una serie de años desde 2004 (11 años), el promedio según la edad de esta categoría se divide en tercios, el 31% eran novillos de más de 3 años, el 33% de 2 a 3 años y el 36% eran novillos de 1 a 2 años. Hoy la realidad es diferente, se observa un rejuvenecimiento de esta categoría en tanto el 19% son novillos de más de 3 años, el 33% tiene de 2 a 3 y el 48% del total de novillos tiene de 1 a 2. Estos novillos más jóvenes necesitan un tratamiento diferente si se quiere terminar con esta edad”.

RAZONES
Para Montes las razones son “básicamente menores nacimientos en años anteriores, faenas y exportación en pie”. La carga total del país con estos datos se ubica en el entorno a las 0,82 unidades ganaderas por hectárea. “Venía en suba y ahora se estaría manteniendo con respecto al año pasado. El tema es que venimos de años buenos, con crecimientos de pasto por encima de lo normal. Ahora hay que ver cómo sigue el clima”.