Policiales | 01 Jul Una caja registradora con la recaudación correspondiente al turno de la tarde fue violentamente sustraída desde una frutería ubicada en Florida entre Grito de Asencio y Solano García, en un barrio definido como “tranquilo” por los propios vecinos.
Según información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, los delincuentes habrían vigilado estrechamente los movimientos del comercio ya que aguardaron el instante en que los repartidores no se encontraban, los perros estaban atados y otro hombre había salido a comprar alimentos para los canes, permaneciendo únicamente detrás del mostrador una empleada. Esta no apreció que eran dos los sujetos que habían llegado en moto, ya que solo uno ingresó al local y solicitó mercadería. Cuando la empleada volvió la espalda un instante al supuesto cliente para despachar el pedido, los malvivientes dañaron el vidrio de una ventana y extrajeron violentamente por allí la caja registradora, incluyendo los cables de conexión eléctrica. Al salir, la mujer observó que los ladrones emprendían la fuga en una moto roja. Desde el lugar se solicitó la presencia de la Policía y en respuesta acudió personal de la Seccional Tercera. Visiblemente afectada por lo sucedido, la empleada narró lo sucedido, indicando que uno de los delincuentes vestía ropas oscuras, portaba casco blanco y ambos circulaban en una moto roja.
Por otra parte, la cámara de seguridad se encontraba momentáneamente apagada ya que, debido a un corte de energía eléctrica registrado el día anterior, se había desprogramado. Al dueño del comercio, ausente en el momento en que se produjo el ilícito, le llamó la atención ya que, en sus 30 años de funcionamiento, no había sido víctima de hechos de este tipo, aunque en cierta forma se encontraba conforme porque “nadie resultó lastimado; y eso es lo más importante”.