Rurales | 05 Jul Los datos estadísticos aportados por el Instituto Nacional de Carnes (INAC) establecen que la faena de ovinos en Uruguay cayó un 49% durante el primer semestre de 2015, comparada con igual período del año anterior, publica El País.
Según el organismo, se llevan faenados 299.804 cabezas en el primer semestre del año en curso contra una faena de 592.961 cabezas a igual período de 2014. La industrialización de carne ovina en los frigoríficos uruguayos se notó en todas las categorías, no solo en corderos.
Como consecuencia del menor volumen industrializado y exportado, producto de una oferta de lanares que cada vez se recorta más, el volumen generado por las ventas entre los dos períodos de la comparación cayó 43,24%, según las cifras del INAC. En la primera de las fechas mencionadas, se generó una facturación de U$S 25 millones contra U$S 44,06 millones, que corresponden a la generación de divisas del primer semestre de 2014.
En materia de mercados siguió primero Brasil, el gran motor y dinamizador de los precios. A este destino se le enviaron 3.068 toneladas peso canal en lo que va del año, contra las 4.532 toneladas peso canal vendidas al primer semestre de 2014; el volumen vendido cayó un 32,30%.
Mientras tanto, el segundo mayor comprador fue la Unión Europea, donde Uruguay tiene una cuota de 5.800 toneladas y donde van los cortes más valiosos: perniles y lomitos.
Se exportó 1.488 toneladas peso canal en estos primeros seis meses contra 2.015 toneladas peso canal colocadas durante los primeros seis meses de 2014. El volumen vendido mostró un descenso del 26,19%.
En tercer lugar se ubicó China, otro destino importante porque también acapara cortes con hueso y en todas las categorías, ya no solo en corderos. En este destino, el volumen vendido bajó 23,41%; se vendieron 643 toneladas contra 2.735 toneladas peso canal. El valor promedio de la tonelada de carne ovina vendida por Uruguay en el primer semestre del año fue de U$S 3.834 (al 27 de junio de 2015) cuando un año antes llegó a valer U$S 3.959.
El valor promedio cayó un 3,15%. Productores, industriales y autoridades esperan de un momento a otro la habilitación del mercado de Estados Unidos para la carne ovina con hueso, como un elemento dinamizador que incentive a elevar las producciones y hacer crecer el rubro.