PRESIDENTE JORGE DIGHIERO

Locales | 12 Jul El presidente de la Junta Departamental recordó que una vez más, “a treinta años y cinco meses de aquella primera vez, con la alegría del retorno a la democracia, volví a subir los 43 escalones que nos separan de la vereda; lo hago con humildad personal, pero con el orgullo de haber sido elegido por ustedes para desempeñarme como presidente de este prestigioso cuerpo”. Al asumir el mandato anual, dijo que “será imprescindible que todos olvidemos los sinsabores que unos y otros tenemos para acordar y operar como solamente todos podemos hacerlo. Para lograr este objetivo, conservamos el mismo espíritu negociador que nos indicaron quienes nos formaron en política: acordar siempre con el solo límite de reconocerse a sí mismo”.
“Si todos no aceptamos que la corrupción sea recompensada ni que la honradez se convierta en un autosacrificio, si sabemos que confundir la autoridad con el autoritarismo es como confundir la convicción con el fanatismo, si no esperamos que los problemas se resuelvan, se pospongan o se olviden, vamos a terminar con la inercia como modo de acción municipal”. Sostuvo que “a Paysandú lo cambiamos todos, con líderes del equipo de trabajo y no con jefes, siendo serviciales, pero no sirvientes, creando estructuras sólidas, pero no rígidas, con el paso corto y la mirada larga. Solo si logramos este gran acuerdo político y social, seremos capaces de lograr un presupuesto transparente, que abra las puertas a la alegría y a la esperanza, con centralidad en lo social”.

PRESUPUESTO
Dighiero se refirió al Presupuesto Quinquenal departamental que permita habilitar “la plena reactivación de la hidrovía del río Uruguay y nos permita desarrollar y completar los accesos al sistema portuario de Paysandú y consolidar la región con Artigas, Salto, Río Negro y Soriano, para luego abordar la implementación de la región binacional con Entre Ríos. Región binacional generadora de las sinergias en lo educativo, turístico y productivo, para transformar esta área en un gran nodo logístico. Un presupuesto que brinde “los instrumentos para que el departamento de Obras, los consejos y las juntas locales puedan, de una buena vez, cambiar el panorama de la caminería urbana, suburbana y rural, posibilitando la adecuada circulación para hacer llegar con fluidez todos los servicios, en un esquema de arraigada y estructurada descentralización. Un presupuesto que habilite la coordinación de las acciones con el gobierno central, focalizada hacia nuestro territorio y en el acceso a los servicios que brinda la administración departamental”.
Concluyó citando a Max Weber: “Solo ejerce bien el poder quien toma distancia de él, lo considera pasajero y como servicio desinteresado a la comunidad, solo persiguiendo lo imposible se alcanza lo posible en cada etapa”, confiando en que ello permitirá “ser los constructores de una política seria y responsable, que busque la radicalidad en los resultados, más que en los discursos”.