Locales | 16 Jul La escuela Nº 87 del barrio P-3 podría pasar a ser un centro de estudio de tiempo completo en 2016, según informó a EL TELEGRAFO la inspectora departamental, magíster Nancy Núñez, quien destacó que se repararon los dos salones de nivel inicial, que habían sido dañados en actos de vandalismo.
Al comenzar el año, la escuela estaba jaqueada por jóvenes de la zona que rompían vidrios, salones, incluso el cableado eléctrico. Como ya había informado EL TELEGRAFO, la comisión de fomento y la Inspección de Escuela de Paysandú plantearon al Consejo Directivo Central de Educación Pública (Codicen) hacer un cerramiento del local para evitar los destrozos. Pero hasta el momento no se ha podido lograr; “buscamos todas las formas, pero no conseguimos el cerramiento que se pretendía”, señaló Núñez, aunque “hay una noticia bien interesante” con respecto a este tema.
La inspectora informó que el sábado pasado estuvo el consejero de Primaria, Héctor Florit, con quien recorrieron la escuela. “Ahí surgió la posibilidad de que pasara a ser una escuela de tiempo completo. Y se podría tener algunos recursos más, ya que tiempo completo tiene financiamientos diferentes, para lograr el cerramiento”, señaló. Este cambio sería para el próximo año, informó.
“Es importante que en esa zona haya una escuela de tiempo completo, porque le da prestigio a la comunidad”, aseguró la inspectora. “Se le brindarían todas las comidas y tendrían otro tipo de contención. Además, los maestros recibirían otra preparación porque tienen cursos obligatorios”, destacó.
Asimismo, subrayó que lo que sí se logró fue el arreglo de los salones de nivel inicial que estaban inhabilitados a raíz de los actos vandálicos.

OTRAS OBRAS
Por otra parte, Núñez destacó que durante estos primeros meses de clases se han hecho diferentes obras de mantenimiento, tanto en escuelas como en la Inspección Departamental.
En la inspección, se cambió el piso y se distribuyó el mobiliario. “La Inspección de Escuela no recibe partidas especiales, las partidas que vienen para financiar el edificio en sí son especiales, distintas de las partidas que reciben todas las escuelas”, explicó y agregó que se tienen que manejar con donaciones.
“Quien ha aportado mucho y permitió que se arreglara el piso, que se estaba hundiendo, fue la Fundación Usmen”, resaltó. “Colaboraron sin ningún tipo de problema o de exigencias al ver la situación en que se encontraba la Inspección”, señaló.
En tanto, el mobiliario se cambió de lugar. “Mucho se entregó a escuelas que les hace más falta que acá, se hizo una reestructura en general”, indicó.
La Fundación Usmen también donó 23.000 dólares para la escuela Nº 5 de Guichón, para el arreglo de la cocina y mejoras generales. En la escuela 56 se hicieron arreglos generales en el edificio, y se terminaron las obras de electricidad de las escuelas 89 y 105.
Asimismo, se instalaron las aulas contenedores para inicial en el jardín 103 y en la escuela 95. “Nos falta que venga el salón para la escuela 99, que esperamos que llegue este año”, dijo Núñez. Añadió que “los niños están trabajando igual, aunque el salón no es el más adecuado, es una galería que se cerró y acondicionó, pero no brinda las condiciones para que trabajen los chiquitos”, manifestó.
Además, se hicieron trabajos de albañilería y reformas sanitarias en las escuelas 1 y 43; reparaciones en sanitarios en las escuelas Nº 62, 65 y 91; reparaciones varias y de electricidad en la Nº 28, 11, 13 y 21.
Y por último, se reparó el piso del gimnasio de la escuela Nº 2; además de pintura en general, así como también en la 57 y 77.