Locales | 12 Jul “Se terminaron los sheriffs; soy bueno, pero no nabo; arreándome con el poncho no corre, que quede claro acá y lo sepa todo el departamento”, dijo Guillermo Caraballo al hacer la instalación pública del municipio de Porvenir sin la presencia del alcalde Ramiro Ayende y sin poder ingresar al municipio, que estuvo cerrado con candado.
Como fuera informado, Ayende había indicado que no iba a participar y que por su parte suspendía el acto porque en las últimas horas fue trasladado uno de los dos funcionarios que especialmente había pedido, Cristopher Salywonzick.
A las 14, hora prevista para el acto, el municipio de Porvenir estaba cerrado con llave cuando las autoridades que acompañaron los actos públicos de instalación de los gobiernos de tercer nivel llegaron, con la excepción del diputado Nicolás Olivera, el alcalde de Quebracho, Mario Bandera, y el exintendente Bertil Bentos, que habían estado en Chapicuy, Quebracho y Lorenzo Geyres, y más tarde también asistieron a Piedras Coloradas y Guichón. Caraballo se refirió a eso cuando dijo en Porvenir: “quiero agradecer especialmente la presencia de Walter (Verri) y de Cecilia (Bottino) porque en la gira venían representantes del Partido Nacional, el diputado Olivera, el exintendente Bentos y el exintendente Bandera que no están aquí. Creo que eso tampoco contribuye a la fortaleza institucional que tiene que tener la constitución de estos ámbitos”. Del acto sí participaron ediles titulares y suplentes. Entre los titulares faltaron Ayende y Daniel Gronros. En un acta firmada en la ocasión, se designó presidenta ad hoc de la asamblea a la concejal y exalcaldesa Sylvia Scaboni.
Caraballo subrayó que “creo que hay gente que confunde descentralización con autonomía. Descentralización no es cumplir caprichos propios. Hemos estado recorriendo los municipios con un mismo mensaje, que venimos a trabajar para construir”. Y agregó: “apelo a que prime en el corto plazo la racionalidad; esto se tiene que solucionar”.
Ante el desplante del alcalde Ayende, Caraballo aseguró que “no estoy enfadado, simplemente este es un dato de la coyuntura que atraviesa esta jornada y hay que superarla. Así que reitero, soy bueno, pero no tonto y no me voy a dejar arrear con el poncho, que quede claro”.
Por otra parte, aseguró que “debe quedar claro, a los que estamos presentes y a los que están ausentes, que es la gente la que va a juzgar esto. No yo como intendente, es la gente”. Además, aseguró que “la gente de la jurisdicción de Porvenir tiene que tener claro que este intendente no va a tomar ninguna medida antipática a raíz de este acontecimiento”.
“Y una cosa más”, dijo dando un paso hacia adelante para acercarse al público presente. “Quien no sabe, tiene que aprender. Porque la ley (de descentralización) dice con claridad que el intendente es el que dispone de los recursos humanos y materiales. Así que el que no sabe, que aprenda, le ponemos asesores jurídicos a disposición para que le den una clase”.
“Estos son gobiernos con la gente, acá hay gente de todos los partidos, venimos a construir. Va a ser difícil, por supuesto, si somos de partidos diferentes. Pero ese es el desafío. Esto tiene que llevar a que agudicemos la inteligencia, el diálogo y el estilo (de gobierno). Y lo vamos a hacer. Este episodio es tan solo una anécdota en el transcurso de un quinquenio. Así que el mensaje es claro: a los que han asumido, el deseo de una muy buena gestión y la certeza de que van a contar con nosotros. Nuestra idea es relacionarnos directamente a través del departamento de Descentralización”.
Asimismo, aseguró que “hubo un cambio sustantivo en el funcionamiento, la gente está más informada. Cuando llegamos acá, toda la gente ya sabía más o menos lo que iba a pasar, por la publicación en el diario, por los medios. Este cambio en el funcionamiento de la sociedad no es menor y nosotros somos parte de este engranaje”.
“Vamos a trabajar con todos por igual, que nadie se crea dueño de los recursos humanos y materiales. Ese es un gravísimo error conceptual. De ellos vamos a disponer nosotros en una concepción más global e integral de todo el departamento”, aseguró el intendente de Paysandú.

“ADENTRO O AFUERA”
Liliana Geninazza, encargada de Despacho del departamento de Descentralización, indicó que “estamos acá construyendo un acto democrático, gracias a la ley de descentralización, y a través de ella el pueblo puede ser escuchado”.
“Vamos a venir acá seguido, estaremos adentro o afuera, pero vamos a estar. Nosotros no podemos permitir que una ley no se pueda poner en funcionamiento porque a alguien, caprichosamente, se le ocurre establecer condiciones para sesionar”, agregó.
“Es insólito que no se reciba al intendente. Debe ser un punto inédito en el país que cualquier gobernante de cualquier partido no reciba a un intendente que asume y quiere venir a encontrarse con su pueblo”.
Quien fuera alcaldesa hasta el jueves pasado, Gladys Amarillo, hizo un balance de gestión y dijo que “se hizo todo lo que se pudo”, destacando el esfuerzo de los funcionarios y agradeciendo el apoyo de la gente residente en el municipio.

“SIENTO VERGÜENZA AJENA”
Sylvia Scaboni --quien en un aparte dijo que aún considera si asumir como concejal o no, porque “para apoyar a Porvenir sí, pero para ser maltratada no me parece”-- también hizo uso de la palabra. “Siento vergüenza ajena. Pido disculpas en nombre de los demás concejales por este hecho que se está dando”.
“Hay que trabajar con educación, valores y humildad. Si no se tiene estos valores... Podemos hablar tranquilamente porque aquí en el municipio en estos cinco años trabajamos siempre respetando a la persona, más allá de alguna diferencia”.

“NO ES UN BUEN COMIENZO”
Consultado por EL TELEGRAFO en relación a cómo se puede destrabar este conflicto, Guillermo Caraballo dijo que “el intendente ya dio su señal: hizo el acto con la gente”. Reiteró que “espero que aparezca la racionalidad, porque me parece que no es un buen comienzo”.
“Hemos demostrado nuestra vocación de establecer canales de diálogo y nos encontramos con esta situación que va a contrapelo de lo que estamos haciendo. No pasó nada similar en ningún otro municipio”, indicó Caraballo.
Confirmó que en Piedras Coloradas “planteé este tema a (Bertil) Bentos y lo haré también con otros actores diferentes del Partido Nacional, porque creo que lo que corresponde es hablar este asunto a nivel político”.

QUEJAS DE EMPLEADOS
Una vez concluido el acto en Porvenir, un grupo de empleados municipales denunció al intendente Caraballo malos tratos que --dijeron-- recibieron en el mismo comienzo de administración del alcalde Ayende, que cortó el diálogo y habría amenazado con “represalias” si no se seguían al pie de la letra sus decisiones. Expresaron que sentían temor al plantear este problema, precisamente, porque podrían ser pasibles de sanciones, pero admitieron que no veían otra salida que no fuera hablar directamente con el intendente. “Créanme --y es lo que puedo decirles ahora-- que su mensaje me ha llegado claramente. Muy claramente”, les respondió Caraballo.

PRESENTARÁ RECURSO
Por otra parte, el funcionario Cristopher Salywonzick confirmó a EL TELEGRAFO que presentará recurso a la decisión de traslado del intendente Caraballo por entender que no es justa y que no toma en cuenta sus aptitudes. Recordó que cuenta con un plazo legal de diez días para presentar el recurso y que se apresta a seguir esa vía.
Caraballo, en tanto, aseguró a EL TELEGRAFO que su decisión en ese sentido “está firme”.