Locales | 13 Jul Fue superado el conflicto entre las empresas agremiadas en la Federación del Transporte de Bebidas (Fetrabe) y las Fábricas Nacionales de Cerveza (FNC), tras diez días durante los que los colegas de los transportistas de la Intergremial del Transporte de Carga Profesional (ITPC) y la propia Fetrabe entorpecieron o impidieron el tráfico de cebada malteada y de la mercadería en las plantas de FNC de Minas, Montevideo y Nueva Palmira.
El conflicto comenzó cuando, desde el 1º de julio, la empresa FNC, de capitales multinacionales de AmBev, resolvió no firmar nuevos contratos con las pequeñas empresas uruguayas distribuidoras de cerveza y refrescos, y contratar una nueva empresa de capitales argentinos. Los camioneros, integrantes de Fetrabe, iniciaron una movilización que contó con el apoyo de sus colegas de la ITPC, que determinó que no se pudiera desarrollar normalmente el trabajo en las malterías y en la fábrica de cerveza. Se argumentó que 36 familias (propietarias de los camiones distribuidores) quedaban sin trabajo y que, además, peligraban los puestos de los dependientes, al menos tres por camión.
Tras una ardua negociación donde intervino particularmente la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados, se alcanzó un acuerdo por el que cinco de las catorce empresas distribuidoras siguen trabajando como hasta ahora, las restantes nueve reciben una indemnización que puede ser utilizada para la reconversión de los camiones --que están adaptados expresamente para el transporte de bebidas-- y los más de cien empleados pasan a depender de las FNC.

TRABAJO PARA DIPUTADOS
El presidente de la Comisión de Transporte de la Cámara de Representantes, Felipe Carballo, dijo a EL TELEGRAFO que “estuvimos trabajando desde que comenzó el conflicto, cuando los distribuidores fueron a la Comisión de Transporte y nos explicaron cuál era el problema que tenían, y nos mantuvimos en contacto con ellos, interviniendo en el tema dentro de nuestras potestades, hasta que se solucionó con la conformidad de ambas partes, más allá de que ninguna consiguió todo lo que pretendía”.
Explicó que en la comisión “decidimos por unanimidad de todos los partidos políticos que debíamos participar en la negociación”, y que “recibimos a la gente de Fetrabe acompañados por la Intergremial del Transporte, la ITPC, representantes de la Foeb y también hablamos con el ministro Rossi. Luego, resolvimos convocar a la gente de FNC, quienes dieron sus fundamentos del cambio de distribuidores y que era un negocio que ya tenían cerrado. Pero en la comisión entendimos que no nos parecía justo que se llevara adelante esa actividad comercial y se dejara a un montón de gente en la calle de un día para el otro. Fue así que mediamos entre las 14 empresas de Fetrabe y FNC, ya que no había ningún tipo de diálogo entre ellos. Logramos que después de tener charlas por separado, con cada uno, se formara una mesa de negociación que estuvo trabajando durante todos estos días, hasta que al final llegaron a un acuerdo y las empresas distribuidoras levantaron el conflicto”.

SALIDA NEGOCIADA
Carballo reconoció que “fue una salida negociada, y el acuerdo permite que algunas de esas empresas sigan trabajando y las demás reciban una indemnización, mientras que los más de cien empleados de las empresas de distribución, de los camiones, ingresarán a FNC”. Explicó que los trabajadores “serán absorbidos por FNC para seguir haciendo la misma tarea, porque había gente que hace 25 años que hace la distribución y tiene un nivel de relacionamiento con el comerciante y conoce la ruta, todo eso tiene un valor que fue reconocido por FNC. Fue una salida negociada, donde se consideraron ese tipo de situaciones, pero no siempre se sale con el cien por ciento de lo que se va a buscar. Hay que ver cómo arrancó el conflicto, con todos los camiones y los trabajadores afuera, y que terminó con la gente de distribución todos con trabajo, hay cinco camiones que van a seguir trabajando en la distribución, que son los más débiles, según el balance que hicieron internamente en Fetrabe, el resto recibe una indemnización”.
Ya desde hoy comenzará a normalizarse tanto la distribución de bebidas --cerveza y refrescos-- como el movimiento de la cebada malteada desde las plantas hacia la fábrica.

REVISAR LOS SUBSIDIOS
Además, el diputado oficialista agregó que “estas situaciones también dejan enseñanzas”, haciendo mención a que “es acertado el planteo de Fetrabe con respecto al subsidio a la bebida (actualmente la cerveza recibe un subsidio del Estado) y pensamos que tenemos que empezar a revisar ese tipo de subsidios, porque se está haciendo un aporte económico importante y, tal vez, la realidad cuando se aplicó ese subsidio no es la misma que se tiene hoy, es otra situación económica. En ese entonces teníamos un Producto Bruto Interno de 18.000 millones de dólares, y hoy es de 52.000 millones”.