Locales | 10 Ago Un automóvil Austin A 10 del año 1947, pintado en el tradicional color negro, impulsado por su motor original de cuatro cilindros, circula en nuestra ciudad y si bien no se puede afirmar que sea el último referente de la marca y el modelo de ese año de fabricación, de existir alguno más su número será más que reducido.
Hebert Austin fue el fundador de la marca Austin, además de ser director de la Wolseley, corredor y proyectista. Lo que hoy solo es la marca de una línea de coches producidos por la British Leyland Ltd, fue durante mucho tiempo la razón social de una de las mayores fábricas de automóviles británica fundada cuando corría el año 1906.
A su muerte, Hebert Austin fue sustituido por E. L. Payton en la dirección de la empresa, quien a su vez se retiró en 1945, pasando entonces a ser director L. P. Lord, quien le dio un gran impulso a la empresa, siendo por otra parte responsable de su resurgimiento durante la posguerra, así como de la reorganización y también modernización de las instalaciones de la fábrica. Por otra parte, logró aumentar las exportaciones, incluso a mercados con los que antes no operaba. Surgieron así versiones de automóviles Austin más que recomendables como el A 10 y el A 40. Ruben Rodríguez es el propietario de este automóvil Austin A 10 de 1947 que hoy presentamos. Comentó que lo adquirió hace unos cinco años y que sus elementos mecánicos son originales en su gran mayoría, con algunas excepciones, como el carburador y asimismo el alternador que sustituyó al dínamo. Una confiable mecánica, un chasis fuerte, consistente le han permitido a este Austin llegar en buenas condiciones hasta nuestro tiempo. En la línea de los autos utilitarios ingleses, estos vehículos –fabricados no bien se recomenzó la actividad de las empresas automotrices inglesas luego de la Segunda Guerra Mundial– fueron cubriendo las necesidades de un mercado local necesitado de nuevos vehículos, pero además fueron exportados a países como el nuestro ya avanzado la segunda mitad de la década del 40.
Este cuatro puertas nos deja observar laterales con tres cristales, el posterior fijo, guardabarros redondeados, luneta dividida en dos tramos, la puerta delantera que se abre en sentido contrario. La careta es vertical con finas barras horizontales y el distintivo de la marca y el modelo, en tanto que el interior deja ver alguna variante como el volante de tipo deportivo. Un utilitario inglés que nació antes de que cerrara la mitad del siglo pasado, y que sigue circulando por las calles sanduceras.

APUNTES TÉCNICOS
Motor: Original de cuatro cilindros.
Embrague: Monodisco.
Caja de cambios: De cuatro marchas.
Frenos: A varilla.
Dirección: Mecánica.
Suspensión: Cuatro elásticos.