Policiales | 16 Ago Entre tres y cuatro denuncias mensuales por casos de presunto abuso sexual --un promedio de casi uno por semana-- se presentan en Paysandú, según la información que se encuentra en poder de organizaciones civiles dedicadas a combatir la problemática y aportada confidencialmente a EL TELEGRAFO. Por otra parte, un total de 10 personas en lo que va del año --un promedio superior a una por mes-- fueron procesadas por la Justicia en el presente año por delitos sexuales.
La mayoría de los casos de presunto abuso sexual son detectados por maestros en las escuelas, reportados por los directores de esos centros a la Inspección Departamental de Primaria, quien los pone en conocimiento de INAU y éste de la Justicia. En menor proporción, las otras denuncias proceden de familiares de la víctima o allegados y son directamente radicadas en sedes judiciales. En ambos casos, la sede judicial actuante dispone distintas medidas a seguir que, hasta el momento, han permitido reunir elementos de semiplena prueba para procesar a 10 personas como presuntos responsables en un total de ocho casos.
Tres de los procesamientos se registraron en agosto. En el más reciente, un guichonense y su pareja fueron procesados con prisión por abuso de menores, en tanto el 7 del presente mes un individuo de 37 años fue procesado con prisión tras comprobarse su responsabilidad en hechos de atentado violento al pudor contra tres menores de edad integrantes de su familia, así como violación de una de ellas.
En junio se registraron tres casos graves de abuso sexual resueltos por la Policía. En uno de ellos un hombre y su pareja fueron encarcelados luego de comprobarse que sometieron a la hija de la mujer, al menos durante cinco años, a atroces vejámenes sexuales en su propia casa. Previamente, un hombre fue procesado con prisión por someter a un joven de 14 años que debió ser intervenido quirúrgicamente por desgarro anal. A principios de ese mes, la Justicia procesó a un hombre de 58 años que había abusado sexualmente de un pequeño de cuatro, nieto de su concubina.
Los otros tres casos de abuso que culminaron con resolución judicial en el presente año ocurrieron en mayo y abril. En mayo, un hombre de 34 años fue enviado a la cárcel como autor de reiterados delitos de atentado violento al pudor especialmente agravado tras vejar a dos niñas de 8 y 10 años, hijas de su pareja. En abril, un individuo de 55 años fue también procesado con prisión tras violar a su hija de 17 años, producto --según dijo-- de hallarse “pasado de alcohol”, en un caso de abuso sexual registrado en Guichón y rápidamente esclarecido por la Policía. Finalmente, el mismo mes, un joven de 19 años fue enviado a la cárcel tras abusar de su sobrina.