Rurales | 17 Ago Con la expectativa centrada en China y Rusia, que demandarán mayores volúmenes de leche y quesos, empujando al alza a los demás productos, los precios internacionales de los lácteos comenzarían a recuperarse a mediados del año próximo, sostuvo el gerente general del Instituto Nacional de la Leche (Inale), Gabriel Bagnato.
Las perspectivas están basadas en análisis internacionales que demuestran que en el correr de 2016 muchos países que hoy “no están en el mercado” ingresarían porque precisarán de una “mejor alimentación” y la leche es clave por su elevado valor nutricional, dijo Bagnato a la Secretaría de Comunicación.
Actualmente, los precios de los lácteos “están deprimidos para lo que es el costo de producción, debido a un ajuste muy fuerte a nivel de la oferta”. Al ingresar al mercado, los países asiáticos o aquellos que son exportadores de petróleo, pero importadores de alimentos, modificarán la conjunción de variables permitiendo condicionalmente una recuperación de los precios a mediados de 2016”, estimó.
Bagnato también hizo referencia a la colocación de mayor cantidad de productos en Rusia y con más normalidad en Venezuela, con lo que todo encauzaría al aumento de precios internacionales en los derivados lácteos.
Señaló que “se puede fijar en leche en polvo y quesos, pero básicamente los precios de estas categorías moviéndose al alza arrastran a los demás productos. Por lo que el incremento de demanda se dará con mayor fortaleza y más énfasis en algunos que en otros, pero en general se dará en todos”.
“Es una luz verde porque entendemos que la situación actual del mercado mundial no es racional y no responde al costo de producción y eso tiene que reajustarse en algún momento, pero el momento exacto es difícil de asegurar. No creo que sea posible este año, sino a mediados del próximo”, indicó el gerente de Inale.

OPTIMISTA
Por su parte, Andrés Padilla, analista senior de Rabobank se mostró optimista en cuanto al escenario internacional para los lácteos en el mediano y largo plazo, en el marco del Congreso Internacional de Leche 2015 desarrollado en Porto Alegre.
Su argumentación se basa en que los mercados emergentes precisan cada vez más una mejor alimentación y la leche es clave por su elevado valor nutricional. Además, muchos países de África y Asia están aumentando el consumo. Señaló que en el largo plazo, son pocos los que conseguirán aumentar la producción. Por ejemplo, India, uno de los mayores mercados de leche, y que es muy cerrado, en el mediano plazo tendrá que abrir un espacio para las importaciones porque hay sin dudas allí una demanda potencial.
Señaló que China, que venía importando a volúmenes muy elevados, redujo en forma importante las compras por la recuperación de la producción doméstica. Entonces, comenzó a importar menos.
Rusia, en cambio, mantiene la prohibición de importar productos desde la Unión Europea (UE) y esto ha significado la colocación de 3 billones más de litros de leche de la UE en el mercado mundial. Entonces, mucha oferta cuando la demanda que venía a un ritmo elevado perdió fuerza. En ese contexto era de esperar que los precios bajaran, aunque no de manera tan acentuada, explicó Padilla.
También puntualizó que la leche como materia prima está sujeta a ciclos: en la medida en que la demanda se recupere un poco en China y Rusia --y que la producción caiga en respuesta a los bajos valores-- el mercado tenderá a encontrar un nuevo equilibro con precios mayores. Si bien se está en la parte baja del ciclo, se espera que al menos la demanda de China esté más estable para el segundo semestre de este año. A pesar de este escenario desfavorable, el analista comentó que la tendencia es a la recuperación del mercado a partir del segundo semestre de 2016.

CONAPROLE
El director de la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole) Miguel Bidegain dijo a IT Lechería que la baja sensible que comenzaron a mostrar los lácteos en los mercados internacionales a mediados del año pasado y que se tradujo en una caída sensible en la facturación de las industrias lácteas generó en Conaprole la merma de su facturación bruta de su ejercicio --que cerró el pasado 31 de julio-- y que “rondará los U$S 300 millones”.
Explicó que, solamente en el caso de las exportaciones, la caída de los ingresos está en el eje de los U$S 240 millones respecto al ejercicio 2013/14.
En ese año, la facturación por ventas internas y externas de las distintas unidades de negocios de Conaprole (incluidas Prolesa, Proleco, entre otras) totalizó $25.452 millones (unos U$S 1.090 millones), un aumento de 27,5% respecto a los $19.447 millones del ejercicio anterior y batió un nuevo récord, según el balance que la cooperativa elevó ante la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM).
Los mayores ingresos de la empresa emergieron del frente externo. Las ventas al exterior de Conaprole durante el ejercicio 2013/14 sumaron $14.770 millones (unos U$S 632 millones), en alza de 42% respecto al ejercicio anterior. En tanto, las ventas locales sumaron $11.787 millones (unos U$S 505 millones) y se expandieron 12% respecto al balance anterior.