Deportes | 31 Ago Dentro del ámbito sudamericano, Colombia volvió a ser protagonista en el Mundial de atletismo, al lograr el segundo título consecutivo para su estrella del triple salto, Caterine Ibargüen, en una edición donde contó con otros dos finalistas (Yosiry Urrutia y Mauricio Ortega) y Eider Arévalo fue séptimo en 20 km marcha.
En el medallero, los colombianos fueron los mejores de Sudamérica, al punto que solo otro país pudo subir al podio, Brasil, con la plata lograda por la garrochista Fabiana Murer.
Ibargüen, de 31 años, tiene como gran objetivo los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro el próximo año, luego de imponerse en Beijing con una marca de 14,90 metros, lejos de su récord sudamericano de 15,31.
La saltadora no pierde desde su plata olímpica en los Juegos de Londres 2012, y suma tres Mundiales de atletismo. Ibargüen se consagró reciente campeona panamericana.
El otro gran resultado colombiano en Beijing fue el de Eider Arévalo, séptimo en los 20 kilómetros marcha.
En cuanto a la actuación celeste, la participación de Déborah Rodríguez y Emiliano Lasa, fue destacable aunque lógicamente no se pudo pelear arriba y, lo más importante y real objetivo planteado, tampoco alcanzar las marcas necesarias para acceder a la clasificación para los Juegos Olímpicos.
Rodríguez marcó un nuevo récord nacional de los 400 metros con vallas, clasificando incluso a semifinales por primera vez en sus tres participaciones mundialistas.
En los 800 metros, la otra prueba en la que fue de la partida la fernandina, no logró pasar de la primera serie.
Lasa, en tanto, tuvo una buena actuación aunque tampoco pudo pasar de la serie clasificatoria en salto largo. Ambos seguirán compitiendo en el exterior, buscando la marca.