Nacionales | 10 Sep Un estudio del Instituto de Relaciones Laborales de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica indica que la conflictividad laboral alcanzó, en el mes de agosto, el nivel más alto desde que gobierna el Frente Amplio. La coincidencia entre las movilizaciones para el cambio en las pautas de negociación del sector privado y los últimos días para elaborar el Presupuesto de los próximos años, influyeron drásticamente para arrojar estos datos.
La realización de dos paros generales en el mismo mes, uno programado desde hacía un tiempo (el 7 de agosto) y otro después de que el gobierno decretara la esencialidad en la educación (el 27), también tienen mucho que ver. Hacía 20 años que no se realizaban dos paros generales en un mismo mes. Durante agosto, en total, hubo 13 conflictos (dos de ellos paros generales), dos ocupaciones (Frigorífico Carrasco y Soul Pack), se perdieron 645.942 jornadas y se involucraron 651.286 trabajadores.
Respecto a julio, la conflictividad global se multiplicó por ocho, y respecto a agosto de 2014, por diez. Además, la conflictividad sectorial creció dos veces respecto al mes pasado y 5,4 respecto a agosto del año anterior. La rama de la educación fue la que tuvo mayor conflictividad en agosto, el 66%, seguido de la administración pública (13%) y la salud (11%).
Debido a la elaboración del Presupuesto para el período 2015/2019, la conflictividad global se debe mayormente (84%) a las reivindicaciones salariales. El 2% de las causas refieren a las condiciones de trabajo, mientras que el 14% restante a otras razones.