Locales | 10 Sep De cara a tener un ámbito para analizar su problemática local, contar con asesoría legal y organizar planteos e inquietudes ante autoridades locales y nacionales, los panaderos de Paysandú instalados formalmente han conformado una mesa permanente que apunta en primera instancia a integrar nuevos miembros, con reuniones semanales en el Centro Comercial, destacaron a EL TELEGRAFO Walter Salazar, Nelson Coduri y Franco Panissa, quienes integran este grupo.
Entre otros aspectos, mencionaron que como ocurre con otras empresas, sus locales son visitados por inspectores que solo van al comercio instalado pero no hacen lo mismo con el sector informal que compite deslealmente, y que tienen costos de estar en la legalidad que sin embargo no son tenidos en cuenta a la hora de la incidencia de este factor.
“Los panaderos hemos formado una mesa permanente del sector en Paysandú y apuntamos a formar un centro panadero en el marco de una serie de objetivos que incluyen la obtención de la personería jurídica, para apoyarnos entre los asociados, de forma de considerar la problemática común y encarar las gestiones que correspondan, así como la búsqueda de avanzar en determinados proyectos”.
Otro objetivo que destacaron es obtener información y asesoramiento en determinadas dependencias, lo que actualmente se hace a través de la organización nacional Centro de Industriales Panaderos del Uruguay (CIPU), y la búsqueda de “asesoramiento contable y jurídico, así como sobre la norma bromatológica”.
Paralelamente, el nucleamiento de empresarios del sector promueve la capacitación de los operarios panaderos, teniendo en cuenta que se ha detectado un déficit en esta materia en la mano de obra, para lo que se conjuga además una alta rotación del personal que trabaja en las panaderías, y un déficit en la asunción de responsabilidades de quienes se incorporan y tienden a cambiar sucesivamente de empleo.

INSPECCIONES A LOS MISMOS DE SIEMPRE
“Estamos además con una problemática que se da en forma constante, y responde al hecho de que siempre que tenemos inspecciones, sobre todo de la Dirección General Impositiva (DGI), nos encontramos prácticamente indefensos, porque en realidad solo vale lo que ellos dicen y no tenemos asesoramiento sobre nuestros derechos y cómo actuar en estas circunstancias”, precisaron. Pero sobre todo “siempre somos los mismos los que recibimos las inspecciones, los mismos los que aportamos, porque las inspecciones se dirigen solo a los que estamos registrados, y hacemos un gran esfuerzo para cumplir con las normas. Pero no van a los lugares en los que hay instalaciones con trabajo en negro, que no pagan DGI, BPS y donde tampoco van las inspecciones bromatológicas”, enfatizaron.
Reconocieron el derecho a trabajar de otros, “pero en muchos comercios de Paysandú se vende pan a un precio imposible para quien está instalado regularmente. Estos costos no pueden absorberse por quienes pagamos impuestos, cargas sociales y cumplimos con las normas bromatológicas respecto a la higiene y las instalaciones que hay que tener para poder trabajar”.
“Creemos que todo el mundo tiene derecho a trabajar, pero estamos enfrentado una competencia desleal y los inspectores de estos organismos actúan solo en el mismo circuito formal, que es como pescar en la pecera, y eso nos afecta porque competimos con precios imposibles”, reafirmaron. Acotaron que “la idea es que aportemos todos y que las cosas sean parejas”, y no solo recorran “a quienes nos tienen localizados”. En tanto puntualizaron que la idea de la conformación de la mesa de panaderos es que se acerquen más empresarios del sector para compartir inquietudes y generar ámbitos de solución en una problemática común para la que generalmente no se cuenta con el asesoramiento adecuado. En este sentido, “apuntamos a poder brindar asesoramiento legal, tanto jurídico como contable, de forma que cuando lleguen esas inspecciones estemos un poco más respaldados y asesorados sobre cómo deben manejarse las cosas”, señalaron. Lamentablemente, “siempre se encuentra la quinta pata al gato” y siempre vale solo lo que estos inspectores imputan a los empresarios, “pero hoy lo que queremos es juntar a todos los panaderos de Paysandú, que vengan a las reuniones que hacemos en el Centro Comercial e Industrial de Paysandú todos los martes, a partir de las 20”, acotaron los empresarios.
“También estamos visitando y conversando con los empresarios de nuestro sector, para tratar de que se arrimen, y al formalizar la gremial, con personería jurídica y otros requisitos, tenemos que contar con un asesoramiento legal permanente, con la idea de formar una comisión”, explicaron.
“QUE SE ARRIMEN”
Si bien la mesa permanente empezó a funcionar hace un tiempo con cuatro integrantes, ya suman 12 los que concurren regularmente, “pero aspiramos a reunir muchos más, por lo menos 20, porque debemos unirnos para tener un ámbito común de consulta a efectos de tener representatividad en los planteos y gestiones que correspondan”, señalaron.
Además, rescataron que se ha tenido buena receptividad en el Centro Comercial, donde “comprometieron apoyo. Vamos a concretar una reunión con autoridades del centro y en lo posible actuar conjuntamente en base a la idea de la capacitación de empresarios y mano de obra”.
En cuanto a la venta de los productos de panificación, consideraron que el sector no escapa a la situación general.
“Vemos que hay una pequeña recesión, pero a la vez lo que más nos está afectando es el tema de las panaderías clandestinas, que no sabemos cómo hacen, que naturalmente no pagan ningún tributo”.
Asimismo, recordaron que a partir de julio rige un incremento salarial para los trabajadores del sector, cuyo monto no se sabe, “pero que naturalmente ya tiene que tenerse en cuenta en los costos de producción de las panaderías”.