Deportes | 22 Sep Mientras se disputaba la Uruguay Cup en el Estadio Artigas, en cancha de Progreso y con la participación de varios equipos se disputó el sábado 12 un torneo amistoso para colaborar con la Escuelita "Pibe Soy" de Rivera. El motivo, según quienes organizaron la jornada, fue que la delegación riverense, conformada por chicos del Inau, había quedado prácticamente abandonada en Paysandú (se alojó en el Batallón), sin comida ni transporte, y que incluso había sido eliminada de la Uruguay Cup por llegar siete minutos tarde.
Las acusaciones apuntaron a los organizadores del torneo, a la Liga Sanducera y a la Intendencia, porque supuestamente existía un compromiso que no se cumplió con respecto a alojamientos, transporte y comida. Y todo resultó ser diferente a lo que se había denunciado.
Julio Logiurato, secretario de Deportes de la Intendencia, dejó en claro que la comuna nunca pactó el compromiso de transporte y demás.
"Nuestro compromiso era ceder las instalaciones del Estadio Artigas y del Estadio Cerrado, para alojamientos, al organizador de la Uruguay Cup. Ese fue el único compromiso que asumimos, y luego se cedió la amplificación a través de la Secretaría de la Juventud, todo a cambio de la contraprestación en materiales deportivos como pelotas de fútbol, de fútbol de salón, conos y redes de vóleibol", expresó. Logiurato afirmó que "de los 60 equipos que participaron hubo este hecho puntual con la delegación de Rivera, y en lo que nada tuvo que ver la Intendencia. El único problema que nos planteó directamente el responsable de la delegación fue que una noche se quedaban sin ómnibus (para volver del Estadio Artigas al Batallón), vimos cómo podíamos solucionar el tema con una remisería, pero resultó que el propio organizador, Gustavo Costela, los llevó a todos. Eso se solucionó en menos de 20 minutos".
El jerarca apuntó que el grupo riverense "viajó con bastante desorganización, se mintió en muchas cosas, y nunca se planteó algo de transporte o comida como se dijo. La Intendencia sí, por ejemplo, se hizo cargo de la alimentación de un equipo carenciado de Rocha en Promoción Social, luego de haber solicitado la Intendencia de Rocha la colaboración". Y con respecto al transporte, se dejó en claro que "el ómnibus en el que llegó la delegación fue aportado por la Secretaría Nacional de Deportes. El vehículo se rompió, volvió a Rivera con el compromiso de que se le enviaba otro, y en realidad no vino porque tuvieron que hacer otro viaje".
Gustavo Costela apuntó en el mismo sentido.
"Me sorprendió porque Rivera vino como invitado, no se le cobró la inscripción, y al final terminó siendo un problema. El técnico nos dijo que el ómnibus los había dejado tirados, pero resultó ser que sabía que se iba a Rivera. Se puso a los niños por delante. El ómnibus fue pago por la Secretaría Nacional de Deportes, cuando se dijo que el técnico lo había pago de su bolsillo cuando, incluso, se difundió en las redes sociales que no tenía trabajo. Y se involucró a la Intendencia, que jamás le prometió el transporte, y a la Liga Sanducera, que tampoco comprometió la comida", dijo.
Costela agregó que "dicen que los eliminamos del torneo, pero cuando llegaron tarde fue el jueves a la mañana. Entonces, si los eliminamos, ¿cómo es que jugaron el jueves de tarde y también el viernes?"