COORDINAN PASAJE DE ALUMNOS SORDOS
DE 6º AÑO A LA ESCUELA TÉCNICA

Locales | 30 Sep Quienes acertaron a pasar por la plaza Constitución en las primeras horas de la tarde de ayer pudieron apreciar la actividad con la que se celebró en Paysandú el Día Nacional de la Persona Sorda, una jornada en la que en todo el país se realizaron actividades de concientización, pero sobre todo de integración.
En Paysandú hay dos escuelas que trabajan con alumnos sordos, la 4 y la 96, que en realidad comparten el local, cuyos docentes organizaron el evento junto con la Escuela de Lengua de Señas Uruguaya de Paysandú, Elsupay.
“Hacemos un evento acá, donde hay mucha gente, en este horario que hay mucho flujo; se invitó a las instituciones más cercanas y se hacen trabajos de los que se realizan en la institución, donde se muestra que los niños sordos pueden cantar, pueden bailar, que no por ser sordos y no escuchar están limitados”, explicó la maestra Lucía Molinelli acerca de la propuesta.
La docente señaló que la organización “lleva todo un trabajo de estudio, de la canción, a ver qué es lo que dice esa letra, para que lo que haga el niño tenga significado”, y agregó que “para lograr esa integración que se pretende se planifica con las maestras de las otras clases y se trabaja en conjunto, no solo por ejemplo el canto, o un baile, sino actividades previas”. El trabajo integrado también ayuda a una mayor comunicación en la escuela, “donde los niños y maestras de otras clases van aprendiendo la lengua de señas. Eso hace que haya una mejor integración en general en la institución, ya sea en el comedor, en el recreo, o durante una salida”, señaló Molinelli.
La maestra destacó a la vez que este año “se logró que se declarara de interés departamental el Día de la Persona Sorda, entonces tenemos el apoyo de la Intendencia y el jueves tenemos una sesión especial en la Junta, donde también se va a explicar un poco lo que se hace”.

BAJAR LAS BARRERAS
La maestra explicó que la integración que se da entre los niños beneficia tanto a los que son sordos como a quienes no lo son.
“Al trabajar en conjunto lo que se hace es que más personas tengan conocimiento de que existen niños sordos, y se pueden romper barreras, porque mucha gente tiene miedo y dice 'no me puedo comunicar', o 'cómo hago', o 'yo no sé ninguna seña'. Y hay veces que si bien es importante saber la lengua de señas de ellos, con un poco de ingenio y de imaginación uno se puede comunicar. Hay señas que son comunes, los gestos son muy muy importantes”, indicó Molinelli.
“En la escuela los chiquilines juegan y no todos saben lengua de señas, y sin embargo pueden jugar, imponen reglas de juego, sin saber la lengua de señas. Entonces al tener mayor población que está en contacto y se rompan esas barreras, ese miedo que se tiene, se va a poder instalar una mejor comunicación y una mayor inserción de las personas oyentes hacia los sordos y los sordos hacia los oyentes, porque tiene que ser de los dos lados”, explicó.

ACCESO
Este año se creó un nuevo cargo de docente de sordos en la Escuela 4, “por la cantidad de niños que tenemos, porque somos la escuela del interior que más alumnos tiene y como son de diferentes edades y hay chiquilines que son sordos con patologías asociadas se hace más difícil el trabajo. Tenemos un grupo de mañana, que está conmigo, y tenemos una sala de lenguaje que está con mi compañera que trata chiquilines que tienen problemas de dislalia, dislexia; y de tarde tenemos los niños más chiquitos, que van desde inicial hasta segundo”, señaló. La maestra valoró que hay niños sordos integrados en el grupo de 6º, es decir que egresan este año de primaria. “Se está haciendo ya la conexión con UTU para que el año que viene vayan a UTU y tenemos una niña integrada en tercero, que viene de mañana conmigo y de tarde está con mi compañera, integrada en una clase común”.
Molinelli explicó que no es fácil logar la integración de estos alumnos, que requiere de un trabajo extra, pero se logra.
“Nosotros trabajamos en conjunto, planificamos juntas, yo de mañana refuerzo lo que la maestra va a trabajar de tarde, entonces esa niña ya va con otras nociones, con otros conocimientos. Así la integración puede ser más factible, porque a veces se trata de hacer una integración pero si no tiene un respaldo, una clase de apoyo atrás, es difícil, porque son muchos chiquilines, y el sordo al no conocer todas las palabras se pierde. Por ejemplo, la otra vez estaban hablando de las bocacalles, que se habían inundado las bocacalles, y él preguntaba: '¿cómo una calle tiene boca?' Entonces había que explicarle, porque ellos saben los significados así, entonces todo ese proceso se hace en conjunto en un equipo de docentes”.
El festejo contó con la participación de los alumnos de los centros escolares 4 y 96, así como también de la Escuela 8 y el Colegio Del Huerto, así como alumnos del Instituto de Formación Docente, ediles y algunos jerarcas de la Intendencia Departamental.