Opinion | 29 Sep En el Día Mundial del Turismo, conmemorado el pasado domingo, la ministra Liliam Kechichián se refirió a la existencia de un cambio en el concepto de turismo en el Uruguay y anunció que se profundizará la modalidad de turismo social para adultos mayores, quinceañeras, domésticas y peones rurales.
En su mensaje, la ministra Kechichián puso sobre la mesa no sólo el tema del turismo interno, sino también del turismo social, que se ha ido ampliando en cuanto a sectores involucrados y localidades del país que es posible visitar.
Dijo que en los últimos 10 años Uruguay ha logrado transformar el concepto de turismo. “Cuando se hablaba de turismo sólo se hacía referencia a la costa atlántica y hoy constatamos, con orgullo, que el concepto abarca a todo el país”, señaló la ministra.
Al respecto, señaló que el Ministerio de Turismo ha impulsado el turismo interno a nuevos destinos a partir del trabajo e inversiones desarrolladas en las ciudades de Nuevo Berlín y San Javier, en Río Negro, Villa Santo Domingo, en Soriano, Belén y Constitución, en Salto, en Artigas y en Rivera.
El llamado Turismo Social busca que las personas que habitualmente no ejercen su derecho al turismo viajen en condiciones adecuadas de economía, seguridad y comodidad, mediante la coordinación y cooperación entre organismos locales, departamentales y nacionales, para permitir el goce del derecho al esparcimiento y la recreación.
Se trata de un nuevo sector de viajeros que surge a partir de las políticas de turismo social y que representa una interesante oportunidad para los destinos alternativos durante todo el año y los consolidados durante la baja temporada, permitiendo un mayor uso de las instalaciones e infraestructura turística, la hotelería, los restaurantes y hasta los guías locales.
Por este sistema, en los últimos seis años un total de 90.000 personas viajaron a diferentes destinos del país. Ahora el Ministerio apunta a incentivar aún más este tipo de viajes para personas de la tercera edad, quinceañeras, trabajadores organizados, domésticas y peones rurales.
El turismo constituye una actividad económica de primer orden, que permite que ingresen al país más de 2.000 millones de dólares cada año. El turismo interno también tiene su impacto, especialmente en los pequeños destinos. En este sentido, según datos del Ministerio, un ómnibus de “turismo social” aporta 8.000 dólares a la cadena que va desde el transportista al hotelero, pasando por restaurantes a artesanos. Ahora, el desafío es profundizar también la capacitación de los empresarios y trabajadores del sector, atendiendo la mejora continua de la calidad de los servicios.