Locales | 21 Oct Ya quedan pocas garrafas de 13 kilogramos de supergss llenas en los distribuidores de todo el país, dado el bloqueo que el sindicato realiza en las plantas envasadoras en reclamo del reintegro y la categorización de dos empleados de la empresa Ducsa, propiedad de Ancap, y cuyo directorio es presidido por José Coya.
Según se indicó a EL TELEGRAFO desde el sindicato, el paro se decidió en cuanto la empresa Ducsa despidió a dos fiscales de planta (quienes supervisan la carga de los envases blancos y los camiones) que trabajan dentro de las plantas de Acodike y Riogas, pero sin que se reconociera el cargo por parte de la empresa paraestatal.
El reclamo del sindicato no es nuevo, sino que lleva más de un año negociando, pero ahora la situación se agravó desde que Ducsa despidió a los dos trabajadores, cuando desde la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) se aconsejaba no despedirlos porque debía reconocerse el cargo que ocupaban.
El viernes se iba a realizar una nueva reunión tripartita en Dinatra, pero Ducsa no se presentó y en la asamblea sindical del fin de semana se decidió que no se distribuyera gas por parte de ninguna empresa.
NADA DE GAS
Si bien el problema es con Ducsa --una subsidiaria de Ancap-- el sindicato optó por bloquear todas las salidas e impedir que las demás empresas como Riogas, Acodike y Megal distribuyan el producto; las plantas están paralizadas desde la madrugada del lunes, lo que motivó la calificación de “situación para nada lógica” desde el sector empresarial, ya que las demás empresas no son responsables del problema de Ducsa.
Esta situación llevó a que la reposición semanal, tanto para Montevideo como para el Interior, no pudiera realizarse según la agenda que tienen las empresas, por lo que están trabajando con lo que queda del stock que recibieron la semana pasada. En Paysandú, como en el resto del país, se trabaja con ese saldo, lo que sería insuficiente para proveer las necesidades de los clientes durante toda la semana.