Deportes | 26 Oct No caben dudas que el triunfo de 18 de Julio sobre Rampla por la mínima diferencia fue justo, pero lo que no fue justo fue que al final sufriera tanto. Luego de haber sido dominador del partido, generando varias opciones de gol que no supo cristalizar, fue apretado sobre el final del partido por un equipo picapiedra jugando “a lo Rampla”, tratando de aprovechar el hombre de más ante la expulsión de Ignacio La Luz en el equipo de Porvenir. Pero al conjunto de Willington Vallejo le faltó afinar en los últimos metros ante un adversario que se defendía con todo, e incluso jugando el delantero y goleador, Gerardo Daglio, como un zaguero más.
Al final fue un partido intenso, aunque quizás no tuvo técnica, pero sí mucha entrega por parte de los dos. El local defendió con uñas y dientes el gol de cabeza de Darío Algarrondo y el ramplense intentaba lograr el empate.
Sin dudas que 18 de Julio fue más que el adversario y por lo tanto mereció el triunfo, pero en el primer tiempo, que fue su mejor momento, no lo supo demostrar en el arco cuando contó con opciones de hacerlo.
Hasta unos minutos después del gol, el dueño de casa dominaba en el terreno de juego, pero luego Rampla se jugó la vida y lo puso en aprietos. Más allá de los intentos de la visita, 18 de Julio supo soportar los embates del picapiedra y quedarse con las tres unidades. Daniel Bazet Fernández.