EXPRESIDENTE DEL CODICEN EN ÚLTIMA REFORMA

Locales | 30 Oct A juicio del exdirector del Codicen y consultor de organismos internacionales de la enseñanza, profesor Germán Rama, los sindicatos de la educación “están quemando la casa” con sus medidas de paro y reducción de horas de clase. Consideró que se necesitan medidas para que Uruguay vuelva a los primeros planos en materia de educación, porque ha quedado rezagado no solo a nivel internacional, sino en la región.
Rama, quien visitó Paysandú en las últimas horas, donde brindó una conferencia en el auditorio municipal y estuvo en sesión especial de la Junta Departamental, reside en París desde hace varios años, por lo que trajo a colación lo que ocurre en Francia, donde los alumnos permanecen desde las 8 a las 17 en los centros educativos, semejantes a las escuelas de tiempo completo que durante la administración del expresidente Julio María Sanguinetti se incorporaron en Uruguay. Destacó que se necesita, por lo menos, mil escuelas de tiempo completo para sustentar un paso adelante en la educación en Uruguay.
Recordó que en 1912, Uruguay fue innovador en la región al recrear lo observado por José Batlle y Ordóñez en Europa y creó un liceo en cada capital departamental, algo impensable en aquella época. Pero fue durante la administración Sanguinetti, entre 1995-2000, cuando se crearon escuelas de tiempo completo que hoy se reclaman como un apoyo a la educación desde temprana edad, a partir de los cinco años, como así también los centros CERP para formación de profesores.
Señaló que el país está atrasado en la comparación internacional, que se evidencia, por ejemplo, con las pruebas PISA y el alto índice de deserción, pues solo un 40 por ciento de los estudiantes culmina Secundaria, mientras que en países europeos y asiáticos ese porcentaje asciende al 90 por ciento.
El profesor consideró que cuando instrumentó su reforma, fue muy resistida por los gremios de la educación y no descartó la posibilidad de que una situación similar se dé cuando se intente avanzar en esta dirección en el escenario actual, pero acotó que es imprescindible aggiornarse para formar y contar con nuevas generaciones a tono con el desafío de conocimiento aplicado en una diversidad de áreas, como se hace, por ejemplo, en el país en que está radicado.

HUELGAS EN LA EDUCACIÓN
Rama sostuvo que hoy hay mucha huelga en la educación. “En aquel entonces estábamos asegurados de que tendríamos entre 180 y 190 días de clase, de 210, pero actualmente se tiene que teóricamente hay 180, de media jornada. En los países europeos y América del Norte, las clases son de mañana y de tarde, y comen en la escuela, tienen 220 días de clase, mientras que nosotros tenemos solo una jornada. Cuando yo era director de Educación, introdujimos las escuelas de doble jornada en Uruguay, de las cuales actualmente hay 201 en todo el país”.
Rama destacó que estas escuelas fueron construidas a partir de las que iniciara en su gestión, “para lo que pedimos préstamos internacionales --con el respaldo del presidente Sanguinetti-- en las escuelas urbanas, porque en las rurales hicimos cosas distintas”.
“Hay 1.200 escuelas urbanas y se empezó en 1997, hoy tenemos 201 de tiempo completo, a este ritmo nos va a llevar todo el siglo. En estas escuelas los chicos aprenden con tiempo lo que no pueden aprender en cuatro horas y además significa dar alimentación a esos niños”, acotó. La idea es que si las familias cuentan con ingresos suficientes, se les cobra y si no, se encara gratuitamente por su carácter social.
“En aquel momento contábamos con cien millones de dólares para levantar esas escuelas, era un programa muy importante, aprobado por el Parlamento”, dijo y lamentó que el sucesor de Sanguinetti (Jorge Batlle) “no promovió para nada esos centros. El ritmo ha sido muy lento. Empezamos en 1997 y desde ese año al 2000 hicimos cien escuelas. Entre el 2000 y el 2015 hay cien escuelas más, hay una gran diferencia”, sostuvo.
El profesor recordó que durante su gestión se aprobó que los niños ingresaran a la escuela a los cinco años, “con lo que tenemos siete años de escuela, que fue un cambio muy importante, porque son 50.000 niños más. Pero teníamos la convicción de que esa era la vía, que había que hacerlo. Lamentablemente en las presidencias siguientes no hubo el mismo ritmo. Han pasado tres presidencias y solo se han incorporado un centenar de escuelas más de tiempo completo”. Consultado acerca de si considera que hay crisis en la educación uruguaya, reflexionó que “evidentemente hay una crisis muy fuerte y perdemos abiertamente en la comparación internacional, no solo con los países desarrollados. Pero en esos casos, todos van a clases de 8 a 12 y de 14 a 17, desde niños y también en Secundaria, eso nosotros no lo tenemos”.
“El problema mayor es que no hay políticas educativas, lo que es grave”, y recordó que en lo que refiere a las pruebas PISA, “hay sesenta países por encima del nivel de Uruguay. Vemos que el mundo está evaluando cómo está la enseñanza, para ver cómo tiene que mejorarse. Todo esto nos está diciendo que tenemos solo una apariencia de educación y seguimos peleando por cosas chicas en la educación. Tenemos que preocuparnos porque las nuevas generaciones tengan una formación equivalente a la de cualquier país desarrollado”.