Deportes | 12 Nov Llega entonado como nunca. Uruguay suma seis puntos en dos fechas, no ha recibido goles y es uno de los tres líderes de las eliminatorias rumbo al Mundial 2018.
Y si el comienzo ha sido impensado, más lo es si se tiene en cuenta que no tuvo a Arévalo Ríos, Edinson Cavani y nada menos que a Luis Suárez. Y está claro que, con algunos retornos y más allá de que tendrá alguna baja y sigue sin contar con el intratable goleador del Barcelona la Celeste enfrentará esta tarde, desde las 18, a Ecuador con el único objetivo de continuar con viento en la camista, sumar de a tres y, de yapa, seguir arriba en la tabla de posiciones bajando a un Ecuador que hasta hoy también llega arriba junto a Chile.
Más allá del comienzo soñado, impensado pero lógicamente disfrutable, está claro que Uruguay y sobre todo el hincha tiene que tener los pies sobre la tierra cuando se trata de un torneo extremadamente largo como lo es este camino premundialista, en el que los altibajos son moneda corriente. Y basta mirar no solo los antecedentes sino lo que está sucediendo con algunos seleccionados en la actualidad.
Pero Uruguay sueña y se aferra a su realidad, sin mirar a los costados. Sabe que hoy deberá visitar la altura de Quito, un rival que también juega, pero llega con el antecedente reciente de haber ganado en La Paz, lo que no es poca cosa, y lo que le permitió además repetir la receta exitosa en cuanto al proceso previo de adaptación.
En cuanto a lo futbolístico, el técnico Oscar Tabárez ha decidido cinco variantes con respecto al equipo que goleó a Colombia en el Centenario, en el último partido, y las tres obligadas. Es que poder contar con Cavani obliga al entrenador en un cambio en la ofensiva, así como el retorno de Arévalo Ríos más allá de que Corujo está suspendido. Y se suma la lesión de Giménez, a quien sustituirá Coates, así como también la ausencia de Cristian Rodríguez.
Después, optará por el ingreso de Lodeiro, así como el de Hernández acompañando a Cavani.
El equipo irá con Muslera; delante suyo se moverán cuatro defensores, es decir Maxi Pereira, Coates, Godín y Cáceres. Sánchez, Arévalo Ríos, González y Lodeiro serán los cuatro que se moverán en el medio, en tanto en la ofensiva estarán Cavani y Hernández.
Tabárez, que está suspendido y por lo tanto dirigirá nuevamente su ayudante Celso Otero, indicó ayer que “vamos a enfrentar a un muy buen equipo, que aprovecha el hecho de jugar como local, está invicto acá desde la eliminatoria anterior, pero vamos a tratar de limitarlo y venimos con el mismo objetivo de los dos primeros partidos, que es lograr los tres puntos, aunque será difícil”.
En cuanto al hecho de haber jugado en La Paz y con éxito en esta eliminatoria, el entrenador señaló que “no es lo mismo la altura de La Paz con la de Quito, y no es lo mismo el equipo de Bolivia que el de Ecuador. En La Paz nunca habíamos ganado en la historia, y en Quito generalmente tenemos dificultades pero alguna vez hemos ganado. Son antecedentes que pueden desaparecer al momento del partido, pero en los dos casos hemos diseñado una estrategia apoyados en la información y antecedentes”.
En filas del local, en tanto, los problemas han abundado en los últimos días, teniendo en cuenta que el entrenador argentino Gustavo Quinteros ha tenido que armar un rompecabezas dado que son varias las lesiones que ha tenido que afrontar el plantel.
Si bien la oncena no está confirmada, todo hace pensar que Ecuador jugaría con Alexander Domínguez; Juan Carlos Paredes, Frickson Erazo, Gabriel Achilier, Walter Ayoví; Segundo Castillo, Christian Noboa, Fidel Martínez; Jefferson Montero; Miller Bolaños y Felipe Caicedo.
Esta tarde dos de los líderes se ven frente a frente. Y la Celeste quiere sacar pecho, obtener un triunfo con altura, y empezar a pensar en Chile.