CONMOCIÓN ENTRE VECINOS Y COMERCIANTES DE LA ZONA

Policiales | 02 Dic Momentos de pánico vivieron dos empleados de una estación de servicio ubicada en la zona de bulevar Artigas y República Argentina, al ser amenazados con una navaja por un asaltante, en una rapiña registrada en horas de la madrugada, que causó conmoción entre vecinos y comerciantes.
Los dos funcionarios estaban tomando mate debajo del cobertizo frente a los surtidores de combustible, donde suelen permanecer en las horas de menor movimiento, cuando una moto con dos ocupantes irrumpió en la pista, procedente de avenida República Argentina.

SE ARROJÓ DE LA MOTO
Antes de detener la marcha, el que viajaba como acompañante --consciente de la ubicación de las cámaras de seguridad-- se colocó la parte posterior de su remera sobre el rostro y se lanzó del asiento para correr directamente hacia uno de los empleados, portando una navaja en su mano derecha, mientras el conductor del birrodado se colocaba en la salida de la estación de servicios sobre bulevar Artigas.
Producto de la urgencia con la que actuaba, el arma blanca se le cayó, pero inmediatamente se inclinó para recogerla y apuntar con ella a uno de los pisteros, exigiéndole el dinero que llevaba encima. Luego, arremetió contra el otro empleado, quien se alejaba en dirección a la avenida. Cuando el asaltante se percató de que ese era el empleado que guardaba el dinero, comenzó a correr hacia él hasta darle alcance y apoderarse del dinero, que ascendía a poco más de 2.000 pesos.
Ya con el dinero, el rapiñero se dirigió hacia la moto en la que lo esperaba su cómplice, que también se había cubierto la cabeza y le cedió la conducción del birrodado para cambiar de roles y entorpecer así la labor policial en caso de ser detenidos. Ambos huyeron por bulevar Artigas al norte. Inmediatamente, desde una Central de Remises cercana se solicitó la presencia de la Policía.

CONOCÍAN LAS CÁMARAS
Momentos después, personal policial observó las imágenes de las cámaras de seguridad de la empresa, pero el rostro cubierto de los malvivientes y la forma en que premeditamente actuaron para no ser captados por las cámaras redujeron notoriamente las posibilidades de identificarlos. La cámara de vigilancia del Centro de Comando Unificado (CCUD) de jefatura de Policía permitió ver a los delincuentes de espaldas y en movimiento cuando huían por bulevar Artigas.
Una vez recabada la descripción de los rapiñeros, se comenzó a buscarlos intensamente y se requirió su captura, montándose un intenso operativo en los barrios donde podrían haberse ocultado. De acuerdo con la descripción del individuo que cometió la rapiña, de complexión corpulenta, se sospechó de un malviviente que recuperó recientemente su libertad, pero en la víspera se practicó un allanamiento en su domicilio con resultados negativos.

CONMOCIÓN EN EL BARRIO
El asalto en la estación de servicios se difundió rápidamente entre vecinos y comerciantes de la zona, quienes se vieron conmocionados ya que ese sector de la ciudad, especialmente al oeste de bulevar Artigas, ha sido objeto de diversos delitos en los últimos tiempos.
En la presente semana, ladrones cortaron la gruesa cadena de la puerta del local de una distribuidora de diarios, sita en la zona de Florida y Dr. Verocay.
Tras causar el daño, aguardaron ocultos para asegurarse que su acción no había sido descubierta, pero, casualmente, uno de los empleados del local arribó y advirtió sobre lo ocurrido.
Además de la sucesión de delitos, los vecinos de la zona se manifestaron perjudicados por el comportamiento, en una situación ya informada por EL TELEGRAFO, de un grupo de ocho menores que limpian precariamente vidrios de vehículos a cambio de monedas --denominados popularmente "trapitos"--, quienes fuman en las puertas de los comercios, se insultan mutuamente y protagonizan reyertas de manera diaria.
En las últimas horas, la Policía debió intervenir, ya que miembros de ese grupo causaron daños en la pintura de un flamante vehículo, estacionado por avenida España, propiedad de un comerciante de la zona.