Paysandú, Miércoles 23 de Diciembre de 2015
Policiales | 19 Dic Una moto Honda 200 cc, perteneciente a la Intendencia Departamental y destinada a la División de Movilidad Urbana para su utilización por el cuerpo de inspectores de tránsito, fue hurtada e incendiada por dos desconocidos, en un hecho insólito que carece de precedentes en los últimos 20 años.
Según información recabada por EL TELEGRAFO, presente en el sitio donde apareció la moto siniestrada, la inspectora Mabel Acosta alertó al Centro de Comando Unificado Departamental (CCUD) que una moto Honda 200 cc, matrícula IIM 153, fue sustraída cuando estaba estacionada junto a otra desde Sarandí y Zorrilla de San Martín, frente al Palacio Municipal y a escasos metros de la Seccional Primera de Policía, por dos desconocidos que emprendieron la fuga por Sarandí al oeste.
Mientras la inspectora se dirigía a radicar la denuncia correspondiente en la Seccional Primera, personal de esa dependencia, Radio Patrulla y Seccional Segunda montaron un operativo en procura de la localización del vehículo. Efectivos del servicio de la brigada “Cóndor” efectuaron intensas recorridas.
No obstante, aproximadamente una media hora después de ocurrido el hurto, vecinos domiciliados al final de calle Solís, en su intersección con Joaquín Lencina, a escasa distancia del terreno donde suelen hallarse motos hurtadas, alertaron que dos encapuchados dejaron abandonada una moto Honda y emprendieron la fuga por Lencina al norte, apreciando que el vehículo comenzó a tomar fuego.
Personal de la Seccional Segunda acudió al lugar y solicitó la intervención de Bomberos, pese a que las llamas habían sido extinguidas por una señora y otros vecinos utilizando agua. En la esquina se hizo presente personal y móviles de las seccionales Segunda y Primera, Policía Científica, y una dotación del destacamento de Bomberos para realizar una inspección primaria.
Las averiguaciones permitieron establecer que, antes de escapar, los autores del robo desconectaron el caño que conduce nafta desde el depósito al motor, y encendieron el combustible, ya que el caño plástico se encontraba intacto. El fuego afectó los plásticos de la careta, los barrales y parte del asiento trasero, desconociéndose el daño que habría causado al motor el recalentamiento al que se vio expuesto. Ese extremo será determinado por el equipo de Policía Científica, que efectuó pericias en la moto siniestrada, tratando de encontrar huellas dactilares en las manoplas del manillar. Con el mismo objetivo, fue desmontada una parte del manubrio y colocada en una bolsa esterilizada, como parte de la recolección de pruebas.
A la vez se estableció que la traba de seguridad de la moto no había sido forzada y, al parecer, habrían sido manipulados los cables del sistema de encendido para poner en marcha el motor. Inmediatamente, personal policial comenzó a investigar el insólito ilícito, surgiendo --en virtud de los datos recogidos hasta el momento-- como primera hipótesis, que habría sido motivado por una represalia.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Dic / 2015
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com