Nacionales | 24 Dic Las autoridades de UTE y los ministerios de Economía e Industria se encuentran ajustando el porcentaje de incremento que tendrán las tarifas de la energía eléctrica. Como ocurrió con el ajuste que se aprobó para 2015, hay dos posturas sobre la magnitud del incremento que debería aplicarse a principios del próximo año.
En la sede de Economía prima la idea de que el incremento tarifario esté lo más cerca posible de la evolución de la inflación de 2015, aunque no por encima. Según la última encuesta de expectativas de El Observador de noviembre, los precios cerrarían 2015 con una suba de 9,6%, en línea con las perspectivas del relevamiento de diciembre que se divulgará el próximo lunes.
En la otra vereda, UTE y el Ministerio de Industria y Energía manejan números en los que consideran un ajuste de tarifas entre 1 y 2 puntos porcentuales por debajo de lo que aspira Economía, que gira en torno al 9%. El tema terminará por laudarse en las próximas horas en una reunión que habrá entre las tres partes involucradas en la toma de esa decisión. La suba del dólar y una inflación que orilla el 10% es uno de los factores que impiden que UTE pueda aplicar una reducción en términos reales mayor en su estructura tarifaria el próximo año, explicaron los informantes.
El tipo de cambio acumula una apreciación de más de 22% en lo que va de 2015 y las perspectivas apuntan a que el billete verde continúe con la senda alcista el próximo año. La mediana de los analistas de la Encuesta de Expectativas de El Observador estimó un dólar a $ 34,5 para el cierre de 2016. En una entrevista que concedió hace poco más de dos semanas a El Observador, el titular de UTE, Gonzalo Casaravilla, declaró que existía una “vocación” de la empresa de ajustar por debajo de la inflación, como lo viene haciendo desde 2010.
“Lo que sí puedo afirmar es que hemos hecho los deberes en el sentido de ajustarnos estrictamente a los compromisos de gestión ante el Ejecutivo. Vamos a cerrar el año con todos los indicadores en el marco del presupuesto acordado para 2015 y 2016. En consonancia con el presupuesto del año 2016, tenemos la esperanza de poder llegar a un ajuste tarifario que respete la tendencia de hace unos años. Es decir, ajustar por debajo del IPC”, afirmó.
Las empresas públicas deberán transferir en el período U$S 440 millones más de lo que hicieron durante el gobierno pasado. Los mayores esfuerzos los tendrá que realizar UTE (U$S 160 millones), seguido por Antel y Ancap con U$S 120 millones cada una. Para el ejercicio 2016 está previsto que UTE transfiera por utilidades a Rentas Generales unos $ 2.108 millones (unos U$S 70,8 millones a valores de hoy).