Locales | 28 Dic Su imagen llama la atención y más si no se está en esa onda que hoy día se denomina rat rod, por el que mediante un proceso especial llevado a cabo en la chapa de la carrocería se la deja en un estado como si hubiera permanecido mucho tiempo a la intemperie.
Por otra parte, unos símbolos –en este caso una cruz pintada en la puerta– marcan un estilo particular. Así, una tonalidad marrón combinada con negro en el techo, pero siempre dando visión de cosa dejada a la intemperie, es lo que permite apreciar este automóvil dos puertas Chevrolet Fleetline del año 1946, propiedad de Daniel Grieco, quien lo tiene en su poder desde hace alrededor de un año.
La versión Fleetline de Chevrolet comenzó a fabricarse en 1941 y en 1942 apareció el modelo de dos puertas. Y precisamente este modelo fue uno de los más importantes fabricados por Chevrolet en la década del 40, ya que en 1947 representó casi el 72 por ciento de las ventas de la marca. En aquel tiempo también se le conocía como “aerosedán”, por la caída tipo fastback que presenta el techo hacia su parte posterior. De allí nació, según los memoriosos de ese tiempo, la denominación de “cola chata” que se les daba a los autos americanos de ese tiempo.
El auto es de líneas sumamente alargadas, y muestra en su frontal un parabrisas más bien angosto, dividido en su parte media, una parrilla frontal ovalada y más bien horizontal. En los laterales, una moldura que se extiende por todo el largo, ubicada por debajo de los cristales. Estos son alargados, más bien angostos, con cristal fijo el posterior. El largo guardabarros delantero presenta tres barras de molduras en su parte posterior y otro tanto sucede con el trasero, más redondeado que aquel. La luneta trasera es de buen tamaño y se encuentra en el declive que lleva a la puerta del portaequipajes.
Este Chevrolet mantiene su motor original de seis cilindros en línea, que funciona de manera impecable. Grieco dijo que desde que tiene en su poder este automóvil, constantemente se ha venido llevando a cabo refacciones, además de dejar el auto en la línea de los rat rod.
A Paysandú y en su tiempo, llegaron varios automóviles de este tipo, sobre todo de los modelos 1946 hasta 1951. Hoy en día es muy difícil encontrar alguno, y precisamente esta es una de las excepciones. Un auto que se ha venido restaurando al gusto y sentir de su propietario, manteniéndolo vivo y en condiciones de circular normalmente y participar de los concursos o muestras, como recientemente sucedió en la provincia de Entre Ríos.

APUNTES TÉCNICOS
Motor: De seis cilindros en línea de 3.548 cc. Embrague: Multidisco. Caja de cambios: Sincronizada de tres velocidades.
Frenos: Hidráulicos.
Suspensión: Elásticos y amortiguadores.