Rurales | 18 Ene Después del tradicional receso de Navidad y Año Nuevo, de tres semanas de duración, se reinició la actividad comercial en el mercado lanero australiano. Durante el receso, hubo varias noticias económicas a nivel mundial que permitían “predecir cierto grado de incertidumbre en las salas de subastas en ese reinicio”, señaló a EL TELEGRAFO José Luis Trifoglio.
El responsable del Departamento de Lanas de Zambrano y Cía. indicó que, entre las noticias que generaron más nerviosismo, “estuvo en el tapete la situación de China, que incluso generó también un fortalecimiento de la moneda norteamericana frente a varias divisas, incluyendo la australiana”.
Todo esto provocó que el mercado lanero australiano cerrara con diferente tendencia según la moneda en que se analice. “En la divisa australiana, en general se registraron aumentos importantes, mientras que en dólares americanos y en un marco de volatilidad, culminó esta primera semana de ventas del nuevo año con tendencia a la baja”, dijo.
Otro factor importante que influyó negativamente en el mercado “fue el volumen de lana que se puso a la venta, y más aún la que se pondrá a la venta la semana próxima”.
Explicó que “los productores australianos toman decisiones de venta teniendo en cuenta los precios en función de su moneda local, los cuales en general subieron, y esa situación los llevó a incrementar los volúmenes a ofertarse para tratar de captar esos niveles de precios que en algunas categorías, esta semana, alcanzaron los niveles más altos de la actual zafra a la fecha. Sin embargo, para países como el nuestro, al evaluar la situación en la divisa norteamericana, la realidad fue diferente”.
“En resumen, cuando analizamos el mercado en la divisa estadounidense, observamos que fue muy sensible a la relación cambiaria y el Indicador de Mercado del Este (IME) bajó 18 centavos (2%) respecto al último remate del año 2015, al ubicarse en el nivel de U$S 8,90 por kilo base limpia”, precisó.
Profundizando en el análisis del comportamiento de los diferentes tipos de lana, “observamos que todas las categorías de lana para peinar corrigieron a la baja. Los descensos se ubicaron entre 0,8% (21 micras) y 5,4% (30 micras). Cabe señalar que el sector de 26 a 32 micras fue el más afectado”. La oferta de la semana superó los 53.500 fardos y la demanda adquirió más del 95%, observándose a varios sectores del comercio activos, principalmente en los dos primeros días de remates.
Para esta semana, los productores australianos han inscripto en los catálogos un total de 60.100 fardos en tres jornadas de subastas que darán comienzo mañana. Trifoglio entiende que “si bien es probable que finalmente esa cifra no se confirme y sea un poco menos la lana que se ponga a la venta, es muy factible que sea la oferta semanal más voluminosa de los últimos años, lo cual (y dependiendo de lo que suceda con la relación cambiaria) podría afectar nuevamente en forma negativa a los precios”.

MERCADO LOCAL
Como sucede habitualmente, en el mercado local, “la actividad se demora un poco más que en otros países en reanudarse en las primeras semanas del año”, dijo el analista de mercado. Sumado a eso, “las noticias del exterior no colaboraron para generar operaciones y en general, tanto la demanda como la oferta están expectantes de ver cómo evolucionará el mercado internacional. Por ese motivo no se publican valores esta semana”, precisó Trifoglio.
A partir de esta semana los operadores esperan comenzar a ver algún movimiento comercial, de manera paulatina. Por este motivo no hay referencias para ningún tipo de lana a nivel local. Incluso la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana envió un comunicado en las últimas horas acusando dicha situación y por tanto no publicó valores.
Sobre fines del año pasado, las referencias que se manejaron, previo al receso, eran para las lanas Corriedale entre U$S 3,50 a U$S 4, mientras que algunas lanas Merino fino alcanzaban sin dificultad los U$S 6.