Paysandú, Domingo 31 de Enero de 2016
Rurales | 30 Ene El encargado de la oficina de los Servicios Ganaderos departamentales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, doctor Nelson González Montemurro, señaló a EL TELEGRAFO que “estamos en una situación de incremento de la garrapata en los campos del departamento”, aconsejándole a los productores que “no bajen la guardia y mantengan el control sobre el parásito, porque estamos viviendo una situación climática que favorece enormemente la difusión”. En muchos casos “estamos con campos altos (mucho pasto), con calor y humedad pese a que en las últimas semanas el agua ha sido escasa. Pero en los últimos meses tuvimos abundancia de agua y días de humedad y eso favorece la prosperidad de la garrapata”, acotó.
Destacó que en los últimos años “se viene anunciando un cierto cambio climático que nos ha dejado prácticamente sin invierno. Los inviernos de los últimos años han sido muy benévolos y eso hace que el ciclo parasitario no se corte durante los meses más fríos, determinando que la progresión, sino se controla, es cada vez mayor, y ya pasa a detectarse el parásito en momento que antes no se preveía y no se veía”.
González Montemurro explicó que cada establecimiento tiene su particularidad, “por dónde están ubicados y por el manejo que hace el productor de su ganado. Pero en términos generales preocupa la situación, porque en campos en donde antes no había garrapata está apareciendo y eso hace pensar que la oferta viene siendo cada vez mayor”. Respecto a la posibilidad de resistencia a los productos que se utilizan, manifestó que “siempre están latentes, pero para eso hay estudios que se pueden hacer en laboratorios y que están al alcance del productor. El que no tenga respuesta a los tratamientos que realiza tiene la posibilidad de recurrir a un veterinario o un laboratorio para la investigación por posible resistencia”.
Consultado sobre la presencia de ganado en caminos del interior, González Montemurro precisó que “responde a otra situación y problemática. Hay productores que tienen más ganado que lo que realmente pueden tener en su campo. Me refiero a pequeños productores de pequeñas extensiones de tierra y que tienen más ganado de lo que pueden”.
Aclaró que no es un momento de penuria forrajera, “ya que es todo lo contrario porque en términos generales abunda el pasto, pero sí se observa que hay productores que pastorean en la calle, lo cual no está permitido, porque tienen más cabezas de ganado que lo que soporta su campo”.
POBLACIONES MULTIRRESISTENTES
De acuerdo a lo que indica la Dirección de Laboratorios Veterinarios “Miguel C. Rubino”, los resultados de pruebas diagnósticas de resistencia de la garrapata Rhipicephalus (B.) microplus a los acaricidas, realizadas entre 2009 – 2013 en nuestro país, establecen la evolución del proceso, “donde hasta el año 2006 la resistencia se determinaba exclusivamente a los organofosforados, los piretroides sintéticos y sus mezclas. Posteriormente, se realizaron los primeros diagnósticos de resistencia a fipronil (2006), amitraz (2009) y a lactonas macrocíclicas (2010)”.
Sostiene que los productos “en base a fluazuron están en el mercado desde 1996, hasta el momento no se han comunicado en Uruguay pérdidas de eficacia a este compuesto. A partir de 2009 se diagnosticó la primera población de garrapatas multirresistentes. Si bien esta situación se considera como incipiente, representa un serio riesgo en disponer de una factibilidad técnica en la lucha contra esta parasitosis. Se considera importante la aplicación de estrategias de control sustentables para el mantenimiento de la eficacia de los productos terapéuticos actualmente disponibles”.
Establecen que “entre los años 2006 a 2010, se confirmó el agravamiento en la situación del control de garrapatas a los acaricidas en Uruguay con los primeros diagnósticos de resistencia al fipronil, amitraz y lactonas macrocíclicas. Desde el año 2009 se comenzaron a diagnosticar poblaciones de garrapatas multirresistentes”.
La vigilancia epidemiológica en el monitoreo de la resistencia y las políticas de extensión en la aplicación de metodologías sustentables de control “son de fundamental importancia en la lucha contra esta parasitosis”, establece el documento. Se considera importante “la aplicación de estrategias de control sustentables para el mantenimiento de la eficacia de los productos terapéuticos disponibles”.
EVOLUCIÓN
La evolución de la resistencia parasitaria es consecuencia de dos factores, “uno inherente al parásito (genética) el cual es difícil incidir y el segundo relacionado a las prácticas de manejo (tratamientos inadecuados, sin una estrategia racional) donde sí es factible intervenir”. Por estos motivos se entiende fundamental “encarar el problema de las parasitosis a través de un control integrado. En este contexto, la aplicación exitosa de alternativas de control sustentable desarrollado en el país para las garrapatas multirresistentes, ha demostrado ser una herramienta válida a considerar”.
En base a los resultados de resistencia presentados –“histórica” más resistencia a una “nueva” molécula– y a las formulaciones de acaricidas disponible, se plantea que en estas situaciones no se deberían utilizar ni los piretroides, ni sus mezclas con fosforados. Al no estar disponibles los organofosforados como monodroga, quedarían solamente dos principios activos eficaces además del fluazuron. La determinación de los principios activos eficaces dependerá del resultado obtenido en el perfil de sensibilidad.
En otros estudios de resistencia se ha observado un alto porcentaje de poblaciones resistentes a piretroides (100%). Si bien no existen en el mercado productos monodrogas en base a organofosforados por los antecedentes de resistencia, los resultados actuales demuestran una mayor proporción de garrapatas sensibles a esta moléculas que las enfrentadas a productos mezclas o solo a piretroides.
El desarrollo de resistencia a los acaricidas es un hecho comprobado en países de la región y extra regionales, “donde la existencia de poblaciones de garrapatas multirresistentes han sido comunicadas en diversos países. En Argentina, el diagnóstico oficial de resistencia es a los organofosforados, piretroides sintéticos y amitraz.
En Brasil, aplicando las mismas técnicas diagnósticas que en Uruguay, se comunicaron los resultados obtenidos en 31 muestras de poblaciones de garrapatas de campo. La resistencia a piretroides fue confirmada en 100% de las muestras. La resistencia a organofosforados y amitraz estuvo presente en el 96,77% de las poblaciones. Para fipronil e ivermectina, la frecuencia de las poblaciones resistentes fue 64,52% y 83,87%, respectivamente. En este estudio, más de la mitad (54,84%) de las poblaciones evaluadas tenían individuos resistentes a todos los ingredientes activos.
“De acuerdo a los resultados internacionales publicados, si bien la situación de la resistencia en Uruguay es preocupante, aún no reviste la gravedad que se plantea en otros países. Esto debe poner en alerta a las autoridades de los Servicios Ganaderos del MGAP, a la profesión veterinaria y a la industria farmacéutica, para que se desarrollen políticas de extensión sobre el conocimiento generado en nuestro país en el control de la garrapata, así como promover el diagnóstico de resistencia. Estos instrumentos deben asegurar un control sustentable y poder mantener en el tiempo la eficacia de los acaricidas”, establece el informe.
BRUCELOSIS Y TUBERCULOSIS
Para el encargado de la oficina local de los Servicios Ganadero, “se trabaja permanentemente en la detección y control de brucelosis y tuberculosis en el departamento”. González Montemurro expresó que “han surgido algunos casos nuevos” –la cuarta sección policial es la última en aparecer brucelosis–, aunque también afirmó que “otras seccionales se han dado de alta con focos que se han visto liberados”.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Ene / 2016
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com