Locales | 13 Mar NUEVA ESTRELLA
Hay una nueva estrella en el cielo... Se llama David. La muerte nunca es aceptada, pero cuando hay una enfermedad de por medio, o cierta mayoría de edad, nos resignamos y agachamos nuestras cabezas a la voluntad de Dios, y la aceptamos.
Pero la muerte de David, atacado salvajemente, asesinado por un brutal, despiadado y cobarde asesino, es difícil de aceptar y así lo sintió toda la sociedad sanducera. Nos unimos al profundo e irreparable dolor de esta conocida familia Fremd Kanovich, pidiendo a Dios que les de fuerza y consuelo ante la injusta muerte de David.
David ya no estará físicamente entre su familia, sus amigos, sus vecinos, ya no recorrerá las calles sanduceras, pero quedará en nuestros corazones como el buen hombre que fue, buen esposo y padre... Esta fecha, 8 de marzo, quedará grabada en el pueblo sanducero.
Que haya paz en su tumba. Y pedimos que todo el peso de la ley caiga sobre este monstruo despreciable, que lo encierren en una celda alejada, solo, para que se consuma día a día, lejos para que no hieda, o tal vez mejor, que lo traigan y lo larguen en la plaza y que el pueblo haga justicia.
¿O tenemos que sentarnos a esperar y pensar quién será la próxima víctima? Se dice que es maestro, y si esa viaraza le hubiera dado estando en clase con niños, también indefensos, ¿se imaginan la tragedia que hubiese sido? Esta clase de gente es un peligro para la sociedad, hay que limpiarlos, ¿qué hacen con internarlo en el Vilardebó? ¿Quieren excusarlo de lo que hizo? ¿Tratarlo de enfermo psiquiátrico, que tiene dos personalidades, que fue un acto religioso? ¡No!, es un cobarde y repudiable asesino.
Las leyes, la justicia, no sé, parece que defiende a los asesinos y entierran a los inocentes. Si quieren pueden cambiar las leyes porque “querer es poder” y seguro que este inmundo asesino, tarde o temprano, saldrá de la cárcel y David, en cambio, no saldrá del cementerio.
Sanducera muy dolida