Policiales | 19 Mar Personal de la Seccional Segunda de Salto investiga la agresión sufrida por un periodista de diario Cambio del vecino departamento, ocurrida en circunstancias en que se encontraba en un bar, en las inmediaciones de Washington Beltrán y Rivera, en la madrugada del martes.
Según información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, el periodista, de 38 años, que trabaja en el área de Deportes, habría comenzado a ser agredido verbalmente desde que ingresó al negocio tras ser identificado con el medio de prensa. En tanto, habría logrado divisar e identificar a tres sujetos que, cuando él se retiraba, fueron tras él para golpearlo. El periodista sufrió varias contusiones en la cabeza y cuerpo, así como traumatismo en un ojo ocasionado --al parecer-- por una patada. Tras permanecer aproximadamente tres horas caído e inconsciente en la vereda, logró incorporarse y dar cuenta de lo ocurrido hasta poco después de comenzado el ataque, ya que luego sufrió pérdida de conocimiento debido a los golpes recibidos.
Así, el periodista habría denunciado a un edil del vecino departamento como uno de los tres agresores, o quien --al menos-- se encontraba presente durante el ataque. Según fuentes cercanas a la investigación, la persona señalada habría sido denunciada públicamente por el diario desde hace algunos meses, en el marco de una investigación que trata de dilucidar algunas irregularidades en boletas presentadas para recuperar dinero por concepto de viáticos.

AMENAZAS A OTRO PERIODISTA
En tanto, otro hecho de ataque contra la libertad de prensa --como ha sido catalogado por los colegas salteños-- se sumó a éste, ya que el periodista Daniel Caiazzo, quien publicó la noticia indicando la identidad del agresor, fue amenazado tres veces con mensajes “claramente mafiosos”.
Así lo expresó Caiazzo a EL TELEGRAFO: “Recibí dos llamadas telefónicas. Una con tono amenazante y desde que atendí habló con forma grosera. Me invitó a pelear y después me dijo que me cuide en la calle. El llamado era para que le revelara mi fuente sobre el hecho, quería saber quién era el testigo que me había pasado la información”.
Asimismo, “a los pocos minutos recibí otro llamado en el que la forma de hablar era más diplomática pero el fin era el mismo, querer saber cuál es mi fuente. Pero también hubo palabras fuertes como 'vas a ver que esto es mentira y te vas a arrepentir. Te va a doler' (...)”. El periodista recibió también un mensaje de texto.
Contando con varios elementos radicó la denuncia en la Dirección de Investigaciones. “No porque tenga miedo sino porque es necesario sentar un precedente; que alguien de la prensa diga basta a estos hechos de patoteros”, mencionó.
Por su parte, la Policía continúa trabajando en pos de esclarecer las circunstancias del ataque al colega de Cambio y establecer la vinculación con las amenazas recibidas por Caiazzo.