Opinion | 16 Mar El presidente Tabaré Vázquez resolvió incorporar el análisis del uso de las hidrovías a la agenda de gobierno, con el objetivo de seguir de cerca una problemática que entiende puede mejorar la salida de las exportaciones en un escenario internacional que se muestra adverso.
El estudio se hará a través del Diálogo Social --una iniciativa que contempla la instalación de mesas de debate para armar políticas de Estado-- luego de un pedido del presidente del Congreso de Intendentes, Sergio Botana.
Este planteo tiene el antecedente inmediato de su consideración durante el III Seminario Taller realizado a principios de febrero en Montevideo, con el auspicio de la Corporación Andina de Fomento, y en el que participaron siete países de la región y España, con más de 500 empresarios, técnicos y gobernadores.
La importancia de desarrollar instrumentos como las hidrovías fue destacado en forma unánime en este encuentro, donde se escucharon mensajes políticos y anuncios de decisiones concretas para mejorar las comunicaciones a través de los cursos del agua.
En lo que atañe al Uruguay, al litoral uruguayo-argentino y concretamente a Paysandú, es de destacar que en este foro el subsecretario de Vías Navegables del gobierno argentino, Jorge Metz, pidió perdón “por 10 años de desencuentros” entre ambas orillas, aludiendo al eje de conflictos que constituyó la gestión de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, en la que se pretendió “castigar” al Uruguay por autorizar la planta de celulosa de UPM-Botnia.
“Entre hermanos no hay que pedir perdón”, respondió el canciller uruguayo Rodolfo Nin Novoa, aseguraron a El Observador participantes del encuentro, aunque naturalmente, el daño ya estaba hecho y significó un duro golpe para el desarrollo de la región, obstaculizando el tránsito de mercaderías argentinas por puertos uruguayos en transbordo hacia destinos de ultramar, entre otros problemas.
Y ya en una consideración más amplia, en el foro de Montevideo la delegación brasileña anunció el dragado del canal de Sao Andrés que permite la unión de la laguna Merín con la Laguna de los Patos para facilitar el tráfico fluvial en Río Grande con los puertos de La Charqueada y Tacuarí del Este uruguayo.
Sobre fines de febrero, el intendente Botana le entregó a Vázquez un documento de 14 páginas en el que se destaca que “las cuencas hidrográficas y sus hidrovías constituyen un factor importante para promover la integración y el desarrollo económico y social de sus áreas de influencia, brindando oportunidades a través de la complementariedad, cooperación y alianzas entre las poblaciones asentadas en dichas áreas”.
“La integración fluvial del Mercosur puede favorecer decididamente en el esfuerzo que realizan los gobiernos nacionales y subnacionales de alcanzar altos niveles de competitividad y de generar nuevos empleos, ampliar la frontera agrícola, dinamizar la agroindustria, desarrollar proyectos de impacto como el turismo, la conectividad y la cultura, promover un sistema logístico de las hidrovías. Ello potenciaría las condiciones de vida de los pueblos que históricamente registran los niveles más bajos de desarrollo económico y social”, dice el documento elaborado por los participantes del seminario sobre vías navegables. Las autoridades gubernamentales y representantes del sector público y privado presentes coincidieron en que es oportuno realizar nuevos esfuerzos para dinamizar las hidrovías, “particularmente porque el uso de un sistema fluvial regional eficiente y el multimodalismo, nos hará más competitivos para enfrentar un escenario internacional cada vez más adverso para nuestras exportaciones”.
La importancia de ese sistema de comunicación para enfrentar un futuro que se muestra adverso, fue destacada además en un carta enviada a los participantes del evento por el expresidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Enrique Iglesias.
“Si la hidrovía era ya un factor importante de la infraestructura del Mercosur en aquellos tiempos, lo es mucho más en los momentos actuales. Estamos entrando en una etapa de bajo crecimiento económico, de caída de los precios de las materias primas, de creciente competencia internacional, de peligrosas tendencias a la fragmentación del comercio mundial con la creación de nuevas áreas preferenciales de menor apetito inversor interno y externo”, dice la carta de Iglesias.
En EL TELEGRAFO hemos dado cuenta ya de que a partir de la asunción del representante del gobierno de Mauricio Macri en la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables se ha logrado un golpe de timón ampliamente favorable para la complementación entre los dos países, desde que se ha dejado sin efecto la absurda prohibición de los transbordos, pero a la vez se ha revertido la prescindencia de la anterior gestión con un decidido apoyo al desarrollo del transporte fluvial por el río Uruguay con la complementación entre ambas orillas.
Incluso más recientemente, se ha generado un auspicioso ámbito de diálogo y negociación con la Administración Nacional de Puertos y operadores en el río Uruguay, para hacer realidad de una buena vez la idea de complementación de puertos, caso del de Paysandú con Concepción del Uruguay y Fray Bentos, para extender la operativa con contenedores por el río Uruguay y apuntar además a que Paysandú sea eje de salida por el río de las cargas procedentes de Paraguay en enlace por contenedores con el puerto de Montevideo.
Este panorama refiere naturalmente a un tema que nos atañe directamente a los sanduceros, y sobre el que ya hay felizmente pasos muy importantes dados, incluyendo entre otros aspectos la reactivación del puerto sanducero, y a la vez haciendo lo propio en la medida de las posibilidades en Salto y volcando recursos para remozar la terminal portuaria de Fray Bentos.
Este instrumento no sería de utilidad si paralelamente no estuviera en marcha el proyecto integral de dragado y balizamiento del río Uruguay desarrollado a través de la Comisión Administradora del Río Uruguay( CARU) por acuerdo y financiación entre ambos países, aunque los trabajos están a esta altura con un cronograma que presenta retraso respecto al estimado inicialmente.
Pero se va por la buena senda e incluso en el caso concreto de Paysandú, se están dando pasos firmes para iniciar la apertura del Canal de Casa Blanca, que no presentaría los problemas de anegamiento de Almirón, y que por lo tanto sería una vía expedita para la operativa en el puerto local.