OPINIÓN

Locales | 20 Mar La gran farsa
Elecciones de directores del BPS. ¡Qué vergüenza! Nos han apercibido a concurrir bajo amenaza de ser sancionados económicamente entre otras formas.
No todas las personas que se encuentran en el padrón electoral están radicadas en el Departamento. Los viajes para venir a cumplir con el acto más sublime del ciudadano: el ejercicio del sufragio también implican gastos.
Los $ 112 millones que demanda esta elección al Estado ¡es mucha plata si se los gasta en vano! Por lo menos debieron concurrir 1,5 millones de personas a votar por los diferentes candidatos a representaciones sociales dentro del Banco de Previsión Social (BPS).
Las elecciones tienen carácter obligatorio y para eso muñidos de credencial cívica los uruguayos concurrieron a 4.000 circuitos repartidos por el país. ¡Qué hermoso!
El día acompañó: soleado, no ventoso. Todos estábamos ansiosos de concurrir a cumplir con el deber más preciado del ciudadano y volver a nuestros hogares, a nuestras familias, con la satisfacción del deber cumplido.
“Y que heroicos sabremos cumplir!”, dice nuestro himno nacional.
Algunos fuimos acompañados por nuestros nietos con la mayoría de edad recién cumplida, quienes quedaron esperándonos afuera. “¿Ya votaste?”, preguntaban asombrados por la premura con la que entrábamos y salíamos del “cuarto oscuro”.
Teníamos que contestarle evasivamente para no ser tan crudos. Es que era un sí, y era un no.
Queríamos evitarles el regusto amargo de hacerles saber “que nos habían tomado el pelo”. Pero no lo logramos porque un integrante de la mesa se levantó para informar a los electores: “les avisamos que no hay listas” .
Había gente con capacidades diferentes. Había gente que aún estando eximida por la edad igual concurrió. Había gente enferma con manifestaciones visibles. ¡No lo podíamos creer! Entonces lo que debió ser una fiesta se transformó en una fantochada.
Los uruguayos no nos merecemos esto. Los adultos mayores no nos merecemos esto. Los jóvenes que nos miran no se merecen esto. Lo dicho siempre: ninguna palabra, ningún gesto, supera el valor del ejemplo.
Me tocó votar en el liceo N°5.
¿Qué cree usted que hice? ¿Qué cree usted que hicieron todos los que allí estaban?
La situación se repitió en varios circuitos (sólo basta consultar las redes sociales).
Desde allí fui a dos medios locales de difusión masiva. Informé sobre la situación. Pedí por favor que envíen personal para cubrir lo que se estaba viviendo.
Se nos antepone la obligatoriedad del voto pero después no están dadas las garantías.
Estamos esperando una respuesta que no nos haga sentir tan minimizados.
Ciudadana preocupada