Policiales | 28 Mar En breve se incorporarán 50 nuevos efectivos a la Policía sanducera, de acuerdo con lo expresado por el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, en su reciente visita a nuestra ciudad con motivo de la asunción del nuevo jefe de policía, comisario mayor (R) Luis Mendoza. Del total, 25 serán derivados a la creación de la Policía Comunitaria Rural, que además de los abigeatos atenderá otras necesidades de la población del interior del departamento.
Consultado al respecto, Mendoza manifestó a EL TELEGRAFO que esta brigada estará formada por aquellos efectivos que tengan “un perfil del interior para tomar contacto directo con la población”. Para ello, se tendrá en cuenta “la experiencia piloto que se lleva a cabo en la Jefatura de Florida, donde la policía comunitaria abarca también el área rural”.
“Hay localidades muy lejanas donde a veces la gente reclama mayor seguridad y es importante ese contacto. Para eso tiene que tener un perfil del interior que permita crear vínculos y tratar las problemáticas. La tarea, si bien es una policía preventiva y no tanto de represión de los delitos, en este caso concreto es el contacto directo con la gente y los problemas que tienen que van más allá de la Policía, por ejemplo ir a hablar con la maestra rural; y todo aquello que favorece la normal convivencia entre los ciudadanos”, sostuvo el jefe.

RECONSTRUIR PUENTE
En tanto, el comisario mayor (R) Mendoza dijo que es necesario volver a reconstruir el puente ciudadanía-policía “que en algunos tramos está un poco averiado”. “Ese puente tiene que ser más fuerte, porque la gente tiene que ver al policía como esa persona que le da seguridad y está cerca. Tenemos que aprovechar las quejas para salir adelante y darles respuesta”, agregó.
Por su parte, se detuvo a considerar que el policía “a veces se siente dejado de lado por los superiores y eso tiene que cambiar. Tienen que ver que estamos, los apoyamos y que les damos para adelante”. A los directores, sostuvo, “les pedí que controlen” porque --como le dijo un instructor en sus años de estudio-- “una orden representa un 10 por ciento y el restante 90 es controlar que esa orden se haya cumplido. Es necesario salir y ver, hablar y no abandonadas las personas”.