Paysandú, Viernes 08 de Abril de 2016
Rurales | 06 Abr Sabido es que intensas lluvias y que se mantienen en el tiempo generan serios inconvenientes a la producción a cielo abierto, pero cuando ocurren en plena zafra de cosecha de los cultivos, aumenta la preocupación por los problemas sanitarios que conlleva y por la incertidumbre de cuándo se podrá ingresar a las chacras.
Esto es lo que sucede actualmente con la zafra de verano. Luego del ingreso a mediados de la semana anterior a las primeras chacras de soja para probar humedad y estado del cultivo, la inestabilidad que se presenta desde el viernes impide que la zafra transcurra en los carriles deseados.
Los pronósticos ya eran coincidentes en la semana pasada sobre condiciones de lluvias por encima de lo normal al norte y centro del país, mientras que en el resto del territorio nacional se prevén precipitaciones muy cercanas a lo normal.
Lo concreto es que hasta la tarde de este martes, las precipitaciones en todo el departamento ya superaban fácilmente los 100 milímetros, tomando como referencia desde el viernes 1º. El mayor registro es en la zona de Arroyo Malo con 152 milímetros, en El Eucalipto y Santa Blanca 143, en el kilómetro 122 de Ruta 26 fueron 138, Puntas de Arroyo Negro 120, ciudad y Paso Guerrero 115, La Tentación 114, colonia José Batlle y Ordoñez 101, Piñera 85 y Merinos 73.
Más allá de que se conocía de antemano lo que podía suceder, ya que la tendencia climática del trimestre (marzo-abril-mayo), en especial para la zona norte y centro del país, era de un otoño lluvioso, “todo esto lo estamos observando con mucha preocupación, porque siempre un período de temporal o mucha lluvia en época de cosecha es complicado”, dijo a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Luis Simean, gerente de la filial Paysandú de la Cooperativa Agraria Nacional (Copagran).
“Los cultivos de verano por suerte tienen un poco más de resistencia y no son tan complicados como los de invierno, pero igualmente nos preocupa –y mucho la situación– y lo único que podemos hacer en estos casos es ir planificando la logística para que cuando tengamos alguna ventanita de buen tiempo en abril podamos disponer de maquinaria y camiones, para así trabajar con la mayor agilidad posible en las plantas para levantar la cosecha”, explicó. El profesional sanducero indicó que durante la semana pasada “fue muy poco lo que se cosechó en la región. Se probó en algunas chacras y entró a planta algún viaje, especialmente de sorgo y alguna de soja, pero son las menos. Fue algún caso muy puntual porque en la mayoría de los casos la condición general de los cultivos están muy desparejos y cuesta entrar y cosechar por problemas de humedad y grano verde”.
Para Simean, “es muy difícil de estimar” cuánto podrá aguantar un cultivo que está pronto para cosechar y a causa de los días de constante humedad y lluvias no se puede trillar. “Lo único positivo es que los ciclos del cultivo venían un poco demorados, por lo que esas chacras que están prontas, que voltearon la hoja y el grano está seco, son las menos y las que se van a ver más complicadas”.
Entiende que el parque de maquinaria “es grande y hay disponibilidad de cosechadoras”, pero también sostuvo que “la concentración será mucha y seguramente no darán a basto”. Acotó que también “habrá buena disponibilidad y logística de camiones”, pero seguramente buena parte del grano “vendrá con necesidad de pasar por la secadora y convertirá un panorama complejo. Aunque es la realidad, habrá que tomar las mayores previsiones posibles”.
OTROS SECTORES
Este panorama de intensas lluvias tampoco es favorable para el sector lechero. Ya están afectando la plantación de los verdeos y praderas, lo cual en la situación que atraviesa la lechería es un golpe más a los bajos precios que recibe. Es que ante los altos costos para producir –adquiere insumos en dólares–, y el escaso valor que obtiene por el litro de leche –cobra en pesos–, esto es otro impacto negativo que deben afrontar.
El traslado del ganado por la caminería interna a esta altura de la semana es complicado. El barro y las distancias que a veces el ganado debe recorrer hacen infructuoso el caminar de las vacas, con los consabidos problemas para el productor. La ganadería de campo no se ve afectada, pero razonablemente en estas condiciones y con una caminería interna deteriorada, los embarques en la semana deberán quedar sin efecto, con los contratiempos que genera para los productores que ya tienen ganado gordo pronto para la industria. Mientras las temperaturas se mantengan por encima de lo normal, para el ganado el agua es siempre bienvenida. El estado del ganado en esta zona del litoral en general es muy bueno y las primeras informaciones sobre los diagnósticos de preñez son buenas en general, tal como lo adelantó a EL TELEGRAFO días pasado el jefe de la Regional Litoral Norte del Plan Agropecuario, Danilo Bartaburu.
ÚLTIMA PARTE
El analista de clima argentino Eduardo Sierra comentó al programa “Tiempo de Cambio”, de radio Rural, que la región padece “la última parte del fenómeno El Niño (de lluvias por encima de lo normal), que genera imprevisibilidad”. El experto explicó que “hay mucha energía” en la atmósfera (vapor de agua y calor que se suman al agua acumulada en los suelos) y graficó el futuro inmediato al decir que habrá que pasar “abril mirando hacia el cielo y deseando que no llueva”. Además, pronosticó “clima algo húmedo y cálido” para el resto del año.
Por otra parte, el diario argentino La Nación da cuenta en las últimas horas que las abundantes lluvias que cayeron el fin de semana sobre gran parte de la región agrícola núcleo paralizaron la cosecha de soja y amenazan con complicar en los próximos días su continuidad por las nuevas precipitaciones que se prevén, según los pronósticos, hasta jueves y viernes próximos. Además de dificultarse la recolección, podrían registrarse serios inconvenientes para la logística del traslado de la producción por el estado intransitable de muchos caminos.
La Bolsa de Comercio de Rosario señaló que en la zona núcleo, que comprende el sur de Santa Fe, el norte bonaerense y el sudeste de Córdoba, en los primeros días de abril ya se superaron en varios puntos los 100 milímetros. Citó los 140 milímetros caídos en Rufino y General Villegas y los 120 milímetros en General Pinto, además de la franja de 100 a 110 mm sobre Álvarez, Santa Teresa, Rojas y Rosario.
En esta línea, advirtió sobre el panorama para los próximos días. “La tormenta, que seguirá instalada hasta el jueves, dejaría entre 70 y 80 mm más. La continuidad del temporal complicaría el sur de Santa Fe, que ya tiene zonas que superan largamente los 500 mm en lo que va del año”, indicó.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Abr / 2016
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com