Opinion | 18 Abr Los representantes de los partidos Nacional, Colorado, Independiente y Unidad Popular anunciaron que presentarán mañana los expedientes de la denuncia penal por la gestión de Ancap, a raíz de la labor efectuada en la comisión investigadora del Senado.
Coinciden en que la Justicia deberá investigar la publicidad del ente en los últimos años, la construcción de un remolcador empujador, la presencia de la intermediaria Exor para cancelar la deuda por petróleo con Venezuela y la construcción de plantas de cemento. Por otro lado, llegará a la Justicia –aunque sin la firma de toda la oposición-- la intermediación del organismo en negocios de Trafigura con PetroEcuador y una supuesta infracción aduanera en exportaciones de crudo, gas propano y butano.
Paralelamente, la mesa política del Frente Amplio reparte un documento de cinco páginas a fin de explicar lo sucedido en Ancap, en el marco de “un camino de mucha repetición mentirosa en la prensa que no tiene contenido”, según denunció la fuerza política.
De acuerdo al documento, que circulará en los comités de base, el “asunto de fondo” es una estrategia de “una parte de la oposición” que instaló en la opinión pública una visión negativa de la actuación del gobierno frenteamplista.
El partido de gobierno interpreta que “hubo un cambio sobre cómo hacer oposición” tras esta tercera etapa, donde se manifiestan “rabiosos, aún sin razones más que el griterío” y recoge explicaciones del expresidente del directorio de Ancap, Raúl Sendic, donde reconoció que “es claro que en el conjunto empresarial de Ancap ente autónomo, más las 18 empresas que lo componen, con la gran cantidad de decisiones en varios directorios, en miles de operaciones diarias, puede haber equivocaciones, errores o decisiones producto de sus complejidades, porque nadie es infalible”. Allí también aclaró que aceptaron la investigadora porque “no había nada para esconder”.
Sin embargo, el organismo tuvo un déficit de U$S 800 millones en tres años, con una capitalización por U$S 600 millones en enero, al tiempo que no se mencionan en el documento las diferencias de criterio existentes en la propia interna frenteamplista, como por ejemplo las cartas publicadas en la prensa, donde nada más ni nada menos que el ministro de Economía, Danilo Astori, y el senador José Mujica expusieron sus diferencias de criterios ante una gestión polémica, cuando ambos encabezaron el gobierno anterior.
Ahora se supo que el balance primario correspondiente al año pasado arrojó pérdidas por unos U$S 160 millones, y esto puede considerarse un balance mejorado si se compara con los U$S 323 millones de pérdidas en 2014. Pero la capitalización antes mencionada, resuelta para aliviar su situación patrimonial, junto al ahorro generado gracias a la caída del precio del crudo a nivel internacional y la resolución de mantener e incluso aumentar las tarifas de los combustibles, ayudaron a que los números ejercieran una presión a la baja y se presentara un panorama propicio frente a un horizonte incierto.