LA CAMINERÍA ES EL GRAN ESCOLLO

Rurales | 17 Abr Con la esperanza de que las anunciadas precipitaciones no se concreten y así poder cosechar las más de 1.000.000 de hectáreas que aguardan ser levantadas en todo el país, se inició este viernes en algunas zonas del departamento la cosecha de soja.
Tarde, a causa de las intensas lluvias registradas desde el viernes 1º de abril hasta el martes 12, y con algunos chaparrones entre miércoles y jueves, los productores se largaron el viernes con la maquinaria procurando levantar lo antes posible el área que las condiciones de piso permitieran.
El ingeniero agrónomo Luis Simean, gerente de Copagran Paysandú, explicó a EL TELEGRAFO que “se está cosechando con humedad, pero sin mucho grano dañado, que era una de las incertidumbres que había a causa de las intensas lluvias”.
Fueron más de 300 milímetros en un lapso de unos 10 días, “pero felizmente la soja está ingresando a los silos de la cooperativa con buena calidad y con el sorgo el panorama tampoco fue tan grave”, dijo el técnico.
Si la inestabilidad no se ensaña nuevamente en abril, “creo que estamos a tiempo de salvar la cosecha”, expresó Simean.
El ingeniero agrónomo Miguel Pastorini, de Agrocentro, indicó a EL TELEGRAFO que “se está cosechando, pero dentro de las posibilidades de cada productor, que ya no solo depende del piso de la chacra para entrar con las máquinas, sino del estado de la caminería vecinal e interna”.
“Por algunos datos que tenemos, sabemos que hay productores que están cosechando con 20 a 24 humedad y con problemas para el trabajo interno, dejando los camiones fuera de la chacra y llevando la cosechadora hasta el camión una vez que está llena”.
Además, explicó que “al no masificarse todavía la cosecha, estamos bien de cantidad de camiones para la logística, pero la parte donde se trancará más será en las plantas de silos para el secado del grano”.

CAMINERÍA
A nivel general para la región, el gran problema de los productores es el barro y las dificultades para el traslado, el trabajo con el ganado en los corrales y el transporte en los caminos vecinales.
Al mal estado de la caminería en general, debe sumarse que el traslado de camiones y maquinaria se realiza de igual forma, porque la inestabilidad se verifica desde hace más de 15 días. Eso hace que los camiones tengan dificultades en muchos de los caminos de la región y a otros lugares directamente no entran por la cantidad de barro.