Policiales | 21 Abr Personal policial de Mercedes, Soriano, detuvo al hombre señalado como autor del asesinato del pequeño Alan Montero, de 9 años, hecho que ha desatado la conmoción en la zona, debido a que el sujeto le quitó la vida a su propio hijo al asestarle varias puñaladas, aparentemente motivado por problemas con la madre del menor, de la cual se encontraba separado.
Según datos obtenidos por EL TELEGRAFO, el homicida, identificado como Pablo Daniel Montero Silveira, de 36 años, alias “el Chupa”, carente de antecedentes penales --pero de quien Jefatura de Soriano difundió sus datos y fotografía-- fue detenido en las cercanías de la Seccional Segunda del citado departamento, luego de un llamado de un vecino que alertó a la Policía sobre su presencia en la vía pública.
Fuentes cercanas a la investigación confiaron que tras ser detenido y correrse la voz en la ciudad, más de 150 personas se congregaron en la cuadra de la sede judicial. Algunos --en menor cantidad-- fueron vistos portando piedras y profirieron gritos en contra del asesino, pensando que se encontraba dentro de la sede penal.
En tanto, el Jefe de Policía de Soriano, comisario general retirado Alberto González Ríos, confió a EL TELEGRAFO que el sujeto está detenido en un lugar no revelado, en resguardo de su integridad física y será conducido hoy a la sede penal. En tanto ayer, ante el juez de Primer Turno, Damián Butto, testificaron alrededor de 20 personas, entre ellos familiares y vecinos.

INTENSA BÚSQUEDA
Allegados a la investigación indicaron que entre la gente reinaba un ambiente de indignación y enojo por la crueldad de lo ocurrido, ya que se estima que el asesino asestó a su hijo más de diez puñaladas, principalmente en la zona del cuello.
Muchos de los que estaban afuera de la sede penal eran vecinos, tanto del homicida como del pequeño. Incluso, la Policía logró divisar a algunos sujetos con antecedentes penales, muy conocidos por ser autores de hurtos y otros delitos, quienes pedían que se lo “largaran” a ellos, término que se utiliza para pedir hacer justicia por mano propia.
Asimismo, se supo que la búsqueda de Montero Silveira fue realizada por dos grupos. Mientras la Policía recibía datos de donde podría estar el asesino e inspeccionaba los lugares señalados, un grupo de vecinos hacía lo propio por su lado. Por su parte, se supo que al momento de la detención, el parricida forcejeó con los efectivos que concurrieron al llamado e incluso logró lesionar a un uniformado.