Locales | 02 May Originalmente, se trataba de un automóvil coupé Ford del año 1939. Una de esas “cupecitas” que los amantes del automovilismo deportivo en Argentina convertían en los ya célebres Turismo Carretera (TC) y que todavía llegan por estas tierras cuando se llevan a cabo competencias como el “19 Capitales Histórico”.
Daniel Palermo, su propietario desde hace diez o 12 años, decía que este auto hace alrededor de una década había sido cortado en su chapa y se le había bajado el techo unos diez centímetros.
Después el auto quedó en zona innundable y “lo agarraron como dos crecidas quedando poco menos como para ir a dar al basurero ya que partes mecánicas quedaron inutilizadas y había poco para salvar”.
“Hace alrededor de un año compré un Ford Taunus de 1979 y otro auto similar de la época, todo con el fin de extraer de ellos, las partes que podían sustituir a las que se habían perdido o quedaron inutilizables”, comentó. Y así comenzó una tarea que tenía por objeto armar un auto utilizando partes de tres o, más sencillo, de tres -uno. El objetivo se logró.
Palermo maniefstó que como nuevo impulsor instaló el motor del Ford Taunus de 2.3 litros y la caja de cambios de cuatro marchas.
“Instalado el motor comencé a trabajar en el tren delantero y posteriormente en el sistema de frenos, bomba, y todos los elementos correspondientes”. Mecánicamente, el auto estaba quedando pronto.
Mientras tanto había que definir lo de la carrocería. “La chapa y la pintura quedaron a cargo de Renzo Larrosa. El auto tomó una forma distinta, diferente diseño a lo que era el original. Tuvo que armar un tablero de instrumentos nuevo, utilizaron una chapa que la forraron con fibra de carbono y se consiguieron faros delanteros. El color del auto pasó a ser naranja dorado”, detalló.
Pues bien, de Ford coupé a “tiburón naranja” seguramente ateniéndose al nuevo diseño del frontal. Con la punta del torpedo aguda y una ancha parrilla. Los faros se ubican en los extremos de la redondeada chapa.
En los laterales no hay dos cristales, uno en la puerta y otro posterior. La popa es redondeada con un amplio baúl portaequipajes y una pequeña luneta trasera. La carrocería luce más baja y el rodado es más chico y ancho que el original. En definitiva, una vieja coupé ahora modernizada y muy de “onda”.