Paysandú, Domingo 22 de Mayo de 2016
Rurales | 15 May “Estábamos prontos para comenzar la cosecha de miel en la zona y llovió más de 600 milímetros, que nos mató a todos”, dijo a EL TELEGRAFO el presidente de Calapis en Paysandú, José Rivero. Añadió que conoce gente del norte que “hasta ahora no ha sacado ni un kilo de miel; la apicultura va a quedar muy castigada por esto”.
El productor y principal de la cooperativa apícola de Paysandú señaló que cuando la abeja estaba produciendo con la floración de otoño “y el 90% de los productores de la zona produce en lugares en donde hay eucaliptus, fue cuando comenzó a llover”.
En oportunidad de una jornada realizada en Tacuarembó a principios de abril, un productor “no había sacado nada y por el exceso de agua no pudo entrar”, dijo. En el departamento de Paysandú, “habíamos sacado algo de miel, pero cuando empezaron las precipitaciones del mes pasado se paró”, agregó.
Rivero recordó que “primero tuvimos la seca de enero, que perjudicó el trabajo, porque la floración parecía que había desaparecido. Las lluvias de febrero mejoraron el panorama y cuando la situación venía muy bien, a principios de abril comenzó a llover y no paró más durante 20 días”.
“Un compañero nos decía: 'A qué lleva la necesidad de los productores'. Durante las lluvias de abril recorrían los campos para sacar miel de sus colmenas. Le preguntaba cómo podían hacer eso, cuando yo no podía ni siquiera caminar en mi casa por la cantidad de barro”, sostiene. “Parece que ponían cadenas y trataban de no romper los caminos de los campos”.
Entiende que, en el ámbito agropecuario, el problema generado por las intensas lluvias durante abril “ha sido general para todos y la apicultura ha sido una más”. Hoy, los apicultores cosechan lo que pueden, “porque tampoco se les puede sacar todo a las colmenas, si no, a los dos meses las tenemos que estar alimentando. Los costos del mantenimiento, en especial del gasoil, son muy elevados”, indicó.
En lo productivo, “cuando comenzaron las lluvias a principios de abril, estábamos en el pico de producción de otoño. Así como golpeó a la soja en el momento de empezar la cosecha, con la apicultura pasó prácticamente lo mismo”. Respecto de la calidad de la miel obtenida, explicó que también se vieron situaciones diferentes. Aclaró que no es bueno sacar miel abierta, cosa que ocurrió con quienes lo hicieron durante los días de lluvia. “Hubo gente a la que se le fue un poco la mano, sacó miel abierta y tiene problemas de humedad. No vamos a decir que no la va a vender, pero será a otro costo”.
PRECIO Y MERCADO
José Rivero se refirió a los valores de venta del producto y explicó que “los precios a los que estábamos acostumbrados desde hace algunos años a esta fecha a vender oscilaban en el eje de U$S 2,80 a U$S 3; hoy estamos vendiendo a U$S 1,20 o 1,15 cuando encontramos, porque tenemos que arrodillarnos para que nos compren la miel. Todos se pueden dar cuenta de las dificultades que está pasando el sector”, aclaró.
“Cuando la realidad aprieta, hay que venderla a poca plata”, sostiene. “Productores que tenían la idea de venderla a U$S 2 no lo pudieron lograr y la han colocado por lo que les daban. Los apicultores no somos solventes y tenemos que venderla”, aseguró.
“Cuando hicimos números para exportar la miel, vimos que nos daba lo mismo que colocarla en el mercado interno”, expresó. Días atrás se concretó el embarque de casi dos contenedores al mercado interno. “No nos servía de nada mandarla al exterior y esperar 60 días para cobrarla, porque además Calapis no cuenta con dinero para adelantarle al productor, y este tampoco puede aguantar 60 días para poder cobrar, por lo que se resolvió vender en Uruguay y cobrar lo antes posible”.
“Para salir con unos pocos en el bolsillo y no perder en el negocio, tendríamos que vender la miel a U$S 2, pero a menos de eso, como se está vendiendo, no se cubren los costos. Si hubiera sido mejor la cosecha, se podría haber aliviado algo y vender un poco más. A U$S 1,15, U$S 1,20 o U$S 1,30 es muy poca la rentabilidad”, dijo.
Calapis ha comercializado en los últimos años su producción al mercado de Alemania y Estados Unidos. Hoy Argentina dispone de 40.000 toneladas de miel para vender y al salir toda esa cantidad de miel, que los productores tenían en galpones, “es una presión para los otros países y el mismo mercado uruguayo, que es pequeño al lado del país vecino”, explicó Rivero, quien aclaró que “este es uno de los factores que han llevado a que los precios bajaran”.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
May / 2016
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com